PSUV: Un partido en formación

Por: Augusto Hernandez

No faltará algún bromista o mal pensado que suponga que cuando se habla de un partido en formación se alude una organización política donde los militantes se colocan en filas, formados para un desfile como el desplegado por los camaradas chinos en el LX aniversario de la República Popular.

.
Cierto es que el Partido Socialista Unido de Venezuela hace pensar en una organización con ínfulas de aparato militar. La nomenclatura interna del partido así lo deja ver. La organización primaria pasó de los batallones a las patrullas. El llamado a las acciones se realiza mediante el toque de diana, cuando las patrulleras y los patrulleros se lanzan a la batalla de Santa Inés o a la gesta electoral como quien asedia un fortín ocupado por oligarcas salvajes.

.
La membresía en el PSUV tiene sus bemoles. En otros partidos, antiguos o modernos, existían nexos entre los militantes que se denominaban compañeros o camaradas, por no mencionar epítetos más pintorescos. La militancia se conocía y trataba con gran confianza, reuniéndose a cada rato en eventos locales o regionales.

.

Ahora las cosas cambiaron. Las patrullas conforman sectores estancos y a veces sus miembros no conocen a los integrantes de su homóloga adyacente, ni saben siquiera donde se reúnen. En esas condiciones quienes tienen la data llevan la ventaja, pues saben a quién localizar para pedirle el voto o acompañarlo a la mesa electoral.

.
Para colmo, se dice que abundan unos entes llamados “patrullas de maletín”, que solo figuran para efectos electorales, aportando votos imaginarios en la postulación o elección de delegados. Esto causa un pelín de malestar que solventarán con su habitual eficiencia los dirigentes del PSUV.

.
En todo caso, vistos los malentendidos que existen frente al gobierno de Uribe y sus aliados de Air Force USA, sería aconsejable que nuestros estrategas militares aprovechen el potencial de las patrullas de maletín para movilizarlas si los preparativos para la paz requieren tácticas desconcertantes de guerra psicológica.