Denuncian que Chávez permite contrabando de diamantes “negros”
Fuente: Citizan News Agency
El gobierno de Hugo Chávez está permitiendo que el cien por ciento de los diamantes producidos en Venezuela sin controles internacionales, concidos como diamantes “negros”, salgan del país y sean vendidos en el exterior de forma illegal.
Venezuela forma parte de una creciente lista de países que están promoviendo el contrabando de diamantes “negros” o “sangrientos”, que son producidos mediante mecanismos que implican la explotación humana e incluso la muerte, advirtió una organización internacional que monitorea este tráfico ilegal.
Venezuela integra una lista al lado de países como Líbano, Costa de Marfil y Guyana, que se niegan a cumplir con el conocido Proceso Kimberley, que establece una metodología para certificar diamantes que hayan sido producido respetando los derechos humanos y otras categorías.
La importancia del Proceso Kimberley reside en que una abrumadora mayoría de vendedores legítimos de diamantes y joyerías en todo el mundo exigen esta certificación antes de comercializarlos.
El proceso surgió como una respuesta a la producción de diamantes bajo explotación de comunidades enteras, para luego utilizarlos como moneda de cambio para adquirir armas, principalmente en países africanos.
Según la organización Partnership Africa Canada (PAC), que promueve el proceso Kimberley en todo el mundo, el gobierno de Chávez decidió suspender la certificación de diamantes mediante el proceso Kimberley en 2005.
En 2008, luego de presiones internacionales, Chávez aceptó evaluar el mecanismo durante dos años. El período se vence en noviembre próximo, pero hasta ahora, Venezuela no ha hecho nada para implementar las condiciones exigidas por el proceso.
De acuerdo al más reciente reporte de PAC, el cien por ciento de los diamantes producidos en Venezuela están siendo contrabandeados al exterior a través de países vecinos, principalmente Guyana y Brasil, donde obtienen falsos certificados para poder ser vendidos en el mercado abierto.
“Sin el acceso a las minas de diamantes en Venezuela, la comunidad internacional no tiene manera de monitorear las irregularidades y los abusos”, dijo Nadim Kara, director de PAC. “No sabemos lo que está pasando, es realmente un hueco negro”, dijo Kara, refiriéndose a las minas de diamantes venezolanas.
El gobierno de Hugo Chávez está permitiendo que el cien por ciento de los diamantes producidos en Venezuela sin controles internacionales, concidos como diamantes “negros”, salgan del país y sean vendidos en el exterior de forma illegal.
Venezuela forma parte de una creciente lista de países que están promoviendo el contrabando de diamantes “negros” o “sangrientos”, que son producidos mediante mecanismos que implican la explotación humana e incluso la muerte, advirtió una organización internacional que monitorea este tráfico ilegal.
Venezuela integra una lista al lado de países como Líbano, Costa de Marfil y Guyana, que se niegan a cumplir con el conocido Proceso Kimberley, que establece una metodología para certificar diamantes que hayan sido producido respetando los derechos humanos y otras categorías.
La importancia del Proceso Kimberley reside en que una abrumadora mayoría de vendedores legítimos de diamantes y joyerías en todo el mundo exigen esta certificación antes de comercializarlos.
El proceso surgió como una respuesta a la producción de diamantes bajo explotación de comunidades enteras, para luego utilizarlos como moneda de cambio para adquirir armas, principalmente en países africanos.
Según la organización Partnership Africa Canada (PAC), que promueve el proceso Kimberley en todo el mundo, el gobierno de Chávez decidió suspender la certificación de diamantes mediante el proceso Kimberley en 2005.
En 2008, luego de presiones internacionales, Chávez aceptó evaluar el mecanismo durante dos años. El período se vence en noviembre próximo, pero hasta ahora, Venezuela no ha hecho nada para implementar las condiciones exigidas por el proceso.
De acuerdo al más reciente reporte de PAC, el cien por ciento de los diamantes producidos en Venezuela están siendo contrabandeados al exterior a través de países vecinos, principalmente Guyana y Brasil, donde obtienen falsos certificados para poder ser vendidos en el mercado abierto.
“Sin el acceso a las minas de diamantes en Venezuela, la comunidad internacional no tiene manera de monitorear las irregularidades y los abusos”, dijo Nadim Kara, director de PAC. “No sabemos lo que está pasando, es realmente un hueco negro”, dijo Kara, refiriéndose a las minas de diamantes venezolanas.
Etiquetas: kimberley Process
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