Juan Carlos Sosa Azpúrua no quiere más elecciones

Fuente: Newsweek

Juan Carlos Sosa Azpúrua

El líder del Movimiento Fénix ve con suspicacia el llamado a marcha de Leopoldo López y asegura que la salida del régimen no será por la vía de los votos, sin
o a través de un camino “alternativo”

Juan Carlos Sosa Azpúrua no se ve a sí mismo haciendo una cola más para votar. Hace rato le perdió no solo fe sino respeto y mucho más al Consejo Nacional Electoral. Para él, cualquier elección en este país es una vulgar farsa. Anda recorriendo el país planteando una idea que, a pesar es compartida por muchos, muy pocos se atreven a lanzarla públicamente: una salida NO electoral. Una salida alternativa. Y es que la idea de que el régimen caiga por el poder del voto, no entra a su cabeza. Quizá pensará que eso es para gente ingenua… o tal vez tontos útiles.

“Fénix es un movimiento creado en octubre del año 2010”, asé arranca su explicación, “con la idea básicamente de hacer un llamado de atención al país, con respecto al fraude electoral que se iba a cocinar en las presidenciales del 2012. Y pronto comenzó a tener presencia importante en varios estados del país. Y la idea era generar un grupo de resistencia. En ese momento se realizarían las primarias y exigíamos que no se realizaran con el CNE. Nos reunimos con la MUD y todo fue infructuoso. Luego nos reunimos con una serie de personajes importantes del país. Posibles candidatos, para que organizaran las primarias fuera del CNE”, pero tampoco nadie les prestó atención. “De manera que se nos ocurrió plantear mi nombre como candidato presidencial, pero solo como estrategia política con la idea de crear una plataforma nacional e internacional para denunciar el fraude electoral, para decir que no existían las condiciones mínimas para hacer unas elecciones”.

-Y eso tuvo como consecuencia que se le borrara del mapa, ¿cierto?

-Sí, nos bloquearon todo acceso a los medios de comunicación. A nivel internacional tuvimos alcance. La idea era evitar que se produjera el fraude. Yo no participé en las primarias. Decidí no fomentar esa barbaridad de pagarle al CNE para que hiciera de las suyas con todos los vicios que conocemos. Para nosotros eso era una contradicción. Y un contrasentido, que la gente del Psuv pudiera votar en esas primarias. Todo eso lo denunciamos abiertamente.

-Y salió electo Capriles…

-Sí, yo tenía esperado que él hiciera lo que yo tenía planificado. No aceptar el fraude electoral, la farsa. Y hacer un llamado alternativo. En ese entonces yo lo apoyé públicamente con esa condición. Y en el momento en que Henrique le levanta la mano a Chávez, le escribí una carta pública de rechazo y Fénix se mantuvo como un movimiento nacional de resistencia, que ha venido reclutando gente bajo la premisa de que en Venezuela no hay una democracia, que la MUD está cohabitando con el régimen sin tener intención de confrontarlo realmente.

-¿Cuál es su mensaje?, lo que le diferencia del resto…

-Lo primero que trato de transmitir, y que es importantísimo, es que comencemos a crear una narrativa distinta a la que está en la matriz de opinión. Lo primero que tenemos que entender como país, es que aquí no hay una salida convencional; que nosotros tenemos pleno derecho a exigir una salida distinta a la electoral. Porque la electoral no funciona. Estamos tratando de convencer a un inmenso caudal de venezolanos para que asuman esta narrativa y que empecemos a hablar de esto públicamente; de manera que se convierta en una tendencia y eso nos ayude a hacer una llave con una serie de factores que tienen capacidad real de actuar.

-¿Actuar de qué manera?

-Desconociendo al régimen, no obedeciendo sus órdenes y obligándolos a deponer el poder. El trabajo que venimos haciendo no solo es civil, sino tratando de llevar un mensaje directo a todo ese sector institucional en el que todavía creemos, y nos consta que existe, dentro de la institución militar. No para que den un golpe de estado, en el sentido en que lo percibe la mayoría de la gente, sino para que hagan llave con la sociedad civil, desconozcan al régimen y no obedezcan sus órdenes a la hora que ellos instruyan para que traten de reprimir o contener lo que puede ser la fuerza social, reclamando su libertad.

”Lo que estamos tratando de hacer es crear una tendencia nacional, en base a que la Mesa de la Unidad no está trabajando por la libertad, sino para cohabitar. Creo que ese trabajo que venimos haciendo como hormigas, ya se está viendo. Y cada día veremos mayor número de personas que públicamente le quitarán la careta a la MUD.

-¿Entonces no ve una salida electoral?

-La supuesta salida electoral es una trampa. Los partidos políticos no están trabajando en base a la salida del régimen sino para preservar sus intereses coyunturales-partidistas. Cuando un mayor número de personas comienza a entender esta premisa y a hablarlo públicamente, nos convertiremos en una tendencia nacional, y la opinión pública hará más ruido. Y esto servirá para que se puedan desencadenar una serie de acontecimientos en pro de que las cosas se den favorablemente, en cuanto a lo que estamos buscando. Tenemos que desentendernos del mensaje de la MUD, con respecto a que el único camino es electoral. Porque la verdad es que en las condiciones actuales tenemos pleno derecho a utilizar vías no convencionales para salir de esta crisis del país.

-¿Qué opinión le pareció la marcha #30M, convocada por Leopoldo López?

-Puede ser que en la mentalidad de mucha gente que salió a marchar el 30M la idea era no apoyar a la MUD, sino exigir libertad al régimen. Respeto la capacidad de organización que hubo y que las manifestaciones se extendieran a tantos estados de Venezuela y algunas ciudades del mundo. Eso es muy loable. Y de cierta forma es un motivo de esperanza, pero yo soy muy suspicaz. Me genera suspicacia un llamado de esa envergadura en el momento y forma en que se hizo y no solo la manera cómo se transmitió la convocatoria sino el contenido de la misma.

-A ver, ¿Cómo es eso?

-Me genera mucha suspicacia que el llamado a marcha se da en el momento en que más ruido se está haciendo con respecto al “narcoestado” que tenemos, el Cartel de los Soles. Hace un mes, cuando surgió el primer escándalo de gran envergadura y reventó la noticia de manera contundente, ocurrió lo mismo: a los dos días hubo una entrevista de media hora en CNN y eso desvió por completo la atención del país y fue justamente con el mismo personaje (Leopoldo López) y ahora que vuelve a reventar el escándalo del Cartel de los Soles, sale otro video del mismo personaje en Ramo Verde y se filtra, por el canal del Estado, haciendo una convocatoria que generaría una discusión muy grande que desviaría la atención del escándalo del narcotráfico. Y me genera incluso más suspicacia que un “preso político” esté llamando a elecciones parlamentarias. O sea, le está solicitando a la tiranía que no solo lo metió preso a él sino a Ceballos, a Ledezma y a todos los demás, le pide que convoque a elecciones. En ese caso tú no le pides eso a la tiranía. No le pides nada. Mucho menos elecciones.

-¿Usted cree que Leopoldo está con el régimen?

-No, no está con el régimen. Yo lo que digo es que Leopoldo está con su interés político. Y creo que el interés político de él es no salir del régimen. Yo no estoy analizando esto en base a si me cae bien el personaje o si creo o no en él. Lo cierto es que en octubre de 2012 él dijo que sacarían las actas que mostraban el fraude, y no lo hizo. En abril de 2013, cuando estaba metido en el grupo más cercano, dejó que Capriles no hiciera el llamado a la calle y sacó sus cuentas para las elecciones de alcaldías en diciembre. O sea, con el fraude tan descarado que hubo, él fue copartícipe de la convocatoria a las elecciones de los alcaldes y además permitió que esas elecciones se transformaran en un plebiscito ante la opinión pública internacional. Entonces para mí, él estaba sacando sus cálculos para fortalecer a su partido político, Voluntad Popular, y lo logró.

”Luego en 2014 cuando revienta la casa, por razones ajenas a él, él aprovecha y queda preso mediante un show. Y lo lógico es que desde entonces hubiera seguido su convocatoria a la calle, a desconocer la tiranía y señalar esto como una dictadura. Y meses antes, cuando Jaime Bayly le pregunta en su cara, si considera que Chávez tuvo una dictadura, él dice que no, que no lo considera una dictadura. Y pasó el 2014 y se olvidaron esas firmas que él mandó a recoger para una supuesta Asamblea Constituyente. Ahora llegan las fulanas parlamentarias y él sigue dirigiendo a su partido para que mantenga una lucha que lo convierta en el más importante. Es una competencia con Primera Justicia. Y para mí, su objetivo principal, es que VP siga creciendo… aun a sabiendas que las elecciones Parlamentarias no llegarán a nada porque el CNE es una farsa.

-Eso indicaría que Leopoldo está jugando sucio… ¿y usted a qué juega?

-El juego de él (Leopoldo López) no es el mismo que el mío. Porque el mío es la libertad del país ya. Y la única libertad pasa por desconocer a este régimen; organizar al país en una unidad que no reconozca a este régimen. Y que nos olvidemos de participar en farsas electorales.