PDVSA: LA CAJA CHICA DE LA ETERNA CORRUPCIÓN

Fuente: Guisos Rojos

Hoy vamos a hablar de los guisos de PDVSA, la empresa que supuestamente era de “todos”, pero que en realidad está controlada por unos pocos “revolucionarios” que en realidad son la nueva burguesía que está arruinando a nuestro país y nuestra economía. Esta semana, PDVSA señaló en un comunicado que la justicia portuguesa está investigando una supuesta apropiación de fondos de PDVSA a través de un banco portugués llamado Espírito Santo. Sospechan que se han malversado hasta 6.000 millones de dólares, fondos que podrían haberse invertido en la producción nacional y dado de comer a miles de familias venezolanas que hoy en día pasan hambre.

Esto es completamente inaceptable. Sin embargo, la corrupción sigue siendo algo completamente normal en Venezuela y, particularmente, dentro de PDVSA gracias a la complacencia de este Gobierno de ladrones. La empresa está repleta de guiseros. Esta noticia es solo una más que se añadirá a la eterna lista de escándalos de corrupción dentro de la estatal petrolera.

Una y otra vez los guiseros de PDVSA y sus enchufados nos demuestran que se preocupan más por lucrarse y llenarse de guisos que por el estado económico de Venezuela y, las consecuencias que ello trae para millones de venezolanos que hoy morimos de hambre o desahuciados. Hoy, el país produce 18% menos de crudo que hace cuatro años. En datos absolutos, las cifras dan aún más miedo: ¡producimos 500.00 barriles menos de petróleo por día que hace cuatro años! El petróleo, desafortunadamente, es la columna vertebral de nuestra economía, porque los guiseros vieron más lucrativo embolsillarse los reales producto de la renta petrolera, que invertirlos en el bienestar de todos los venezolanos, dándonos dádivas y “trapitos calientes” que a la larga no valieron nada. De esta forma, tenemos que nuestra principal fuente económica está funcionando a menos del 50% de su capacidad total. Esto significa que hay menos dólares y, por lo tanto, más pobreza para los venezolanos.

Sin embargo, el dinero que se podría invertir no solo en nuestra industria petrolera para reponerla, sino en las demás actividades económicas del país, acaba en los bolsillos de unos pocos guiseros enchufados que se siguen lucrando a pesar de esta crisis económica. Hoy en día, la deuda de PDVSA llega a los 43 mil millones de dólares, cuestión que se debe en gran parte, por no decir su totalidad, a la corrupción rampante que ha invadido a la empresa. Dejen que les demos unos ejemplos:

Empecemos con Rafael Ramírez, quien fue presidente de PDVSA y ministro de Energía y Petróleo desde el 2004 hasta el 2014, cuando fue destituido. Bajo su gestión, Petróleos de Venezuela perdió 11.000 millones de dólares. Eso representa el presupuesto anual de al menos cinco países centroamericanos. Estos dólares no desparecieron, ¡acabaron en sus bolsillos!

Pero, como ya se imaginan, Ramírez es uno de los muchos guiseros dentro de PDVSA.

Eulogio Del Pino, quien por ahora aún es presidente de PDVSA, pero aparentemente próximamente se unirá a las filas de la ilegal “Asamblea Constituyente”, también ha gozado de esta caja chica llamada PDVSA. Este guisero y su combo aprueban proyectos como el “Mariscal Sucre”, el proyecto con más retrasos, ineficiencia y daños a la nación. Con esta ineficiencia consiguen crear un gas increíblemente caro, cuestión que ellos mismos propician para quedarse con los reales. De esta forma, PDVSA pasó a pagar tarifas diarias de más de medio millón de dólares por cada buque, con sobreprecio. Así, el presidente de PDVSA crea guisos que endeudan a la empresa y a nuestra población, pero que solo generan beneficios para su bolsillo.

¡Y hay muchos más! Roberto Rincón espera como mínimo 13 años en la cárcel por pagar más de 1.000 millones de dólares en sobornos para obtener contratos con PDVSA entre los años 2008 y 2014. Abraham Shiera es dueño de varias empresas energéticas, a través de las cuales pudo obtener múltiples contratos con la estatal petrolera y ganar obscenas cantidades de dinero. Él también fue arrestado y acusado de delitos de corrupción, lavado de capitales y conspiración por violar la Ley de prácticas corruptas en el Extranjero. Hace unos meses, nosotros reportamos la historia de Franco Tortolani, quien fue de taxista a millonario en muy pocos años. Ahora, gracias a sus guisos con PDVSA, vive como un rey, tiene varias casas, avionetas, helicópteros y mucho más.

Estos hombres son solo algunos de los guiseros más conocidos, afiliados a la empresa petrolera, pero ¡quién sabe cuántos más hay!

Esto es indignante. ¡Nuestro Gobierno usa la empresa más importante de nuestra economía para seguir guisando y dejándonos morir de hambre! La escoria del Gobierno ha creado una dependencia económica en el petróleo nunca antes vista y además usa a la industria para seguir arruinando al país. El gobierno de Maduro favorece a un grupo selecto de ladrones e ignora las necesidades del pueblo. Los millones de dólares que se roban estos corruptos, ladrones de cuello blanco, son fondos que podrían ayudar a millones de venezolanos a conseguir recursos para simplemente, ni siquiera vivir, sino tan solo sobrevivir.