Hambre y Enfermedades en la Venezuela del "Período Especial"

Por: Aurelina Fernández

Fuente: Salud Perfecta

La grave crisis económica por la cual atraviesa Venezuela, nos retrotrae al llamado “Período Especial” que “soportó” el pueblo cubano como consecuencia del colapso de la Unión Soviética en 1991, superado gracias a la inyección de ingentes cantidades de petrodólares por parte de Chávez a los chupasangre de la dictadura cubana.

Sin embargo, aquí no vamos a hacer un análisis de la economía cubana, sino de la crisis de la salud en Venezuela y su similitud con lo ocurrido en Cuba. La tendencia observada puede permitir la predicción de que esa amarga pesadilla se repetirá en la otrora potencia petrolífera como consecuencia del despilfarro, la corrupción y la irresponsabilidad de sus gobernantes. 

Es público que la situación en Venezuela es muy grave, que los precios petroleros no repuntarán en los próximos años y que la corrupción y el saqueo sufrido por el país por parte de la mafia criminal chavista agotó todos los ahorros y con ello la capacidad de Venezuela para lidiar con las crecientes necesidades del pueblo. 

Los venezolanos hoy por hoy subsisten a duras penas a su realidad económica y difícilmente pueden tener acceso a una alimentación adecuada y a las medicinas necesarias para atenuar sus eventuales enfermedades. 

En la década de los 90s surgieron en cuba una serie de patologías producto de la imposibilidad por parte de los cubanos para ingerir alimentos que aportarán los nutrientes y vitaminas necesarios para la vida con salud plena. 

La no ingesta de vitaminas del complejo B por ejemplo, desató en cuba epidemias como neuritis óptica que consiste en la inflamación del nervio óptico que acarrea daños en la visión en forma temporal y permanente. En otros casos la deficiencia alimentaria elevó en un 60% la tasa de mortalidad materna y de neonatos. Por otra parte la muerte en ancianos sufrió un salto del 20% y aumentó la tasa de suicidios en casi un 23%.

Los nuevos hábitos alimentarios en Venezuela producto de la marcada carestía de alimentos pueden elevar y generar muchas otras patologías como anemia y raquitismo pero también enfermedades cardíacas, elevación de los valores en los triglicéridos y colesterol, como consecuencia del alto consumo de grasas malas, carbohidratos y la disminución en el consumo de proteínas. 

El otro efecto en la salud pública será el incremento de enfermedades de transmisión sexual debido al crecimiento de la prostitución como forma adoptada por muchos venezolanos para sobrevivir. Esto se agrava por la falta de buena alimentación y una pobre respuesta inmunológica ante esas enfermedades. 

Lamentablemente no existen cifras confiables de la situación de la salud, en Venezuela, pero los índices de mortalidad han debido sufrir saltos importantes debido al resurgimiento de enfermedades que se habían mantenido bajo control como: lepra, malaria y un sin número de enfermedades infecciosas y derivadas del ambiente.

La falta de medicamentos, sus altos costos, así como el oportuno auxilio médico para atender enfermedades incluyendo emergencias han debido dispararse abruptamente. Pacientes con ACV, cáncer, epilepsias, tuberculosis y cardiopatías mueren de mengua en las puertas de los hospitales por falta de asistencia. En muchos casos los pacientes se agravan o mueren producto de bacterias que se encuentran en centros de salud debido a la ausencia de controles sanitarios y asepsia.

Como si todo esto no fuera suficiente han surgidos grupos mafiosos que controlan los abastecimiento en las colas para ventas de alimentos, medicinas, cupos en hospitales y demás actividades conexas.

Tenemos en el horizonte una verdadera crisis humanitaria que pocos, ven, algunos esconden y otros como los jerarcas de la dictadura niegan o les importa NADA. 

Es oportuno hacer un llamado de alerta nacional e internacional, para tomar las acciones debidas y evitar una crisis humanitaria sin precedentes. Los venezolanos están a tiempo para revelarse y resolver la situación que los ha traído al borde del precipicio y del infierno mismo, pero no será por la vía electoral. Reaccionarán los venezolanos? Amanecerá y veremos