Abril de Golpe anti gomero
Por: Alberto Jordán Hernández
“Por la Patria hasta la muerte”, parece consigna castro comunista parodiada por el régimen militar que nos desgobierna, al igual que “morir o vencer”. Afirmamos parece, porque cronológicamente los estudiantes de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la casa que vence las sombras, quienes pasaron a la historia como la Generación del 28, usaron la primera frase como contraseña en el frustrado golpe del 7 de abril del 1928, asonada de la cual se cumplen 88 años.
Con ella se identificaron ante el capitán Rafael Alvarado Franco, apostado en el Palacio de Miraflores.
Veinte años en mando tenía Juan Vicente Gómez (JVG), general de montoner, o chopo e’ piedra, tal designaban a militares de alto rango. Lo ejerció hasta su muerte desde Maracay, que convirtió de hecho Capital de la República y legalmente del estado Aragua, al arrebatársela a La Victoria. Miraflores era sede oficial del Poder Ejecutivo, en la práctica simbólica.
El historiador Jorge Olavarría incluye al dictador en la trilogía de Presidentes sobresalientes (los generales Antonio Guzmán Blanco e Isaías Medina Angarita, son los otros dos), en evaluación administrativa de su mando que duró 27 años.
Pero fue bestial en el trato humano a los adversarios, sobre todo los sometidos a prisión. Entre estos se cuentan unos 400 estudiantes universitarios, apresados después de la festividad de carnaval del citado 1928, que por movilización del pueblo juvenil (no pasaban de 20 años de edad), fueron acusados de subversivos. Dos meses permanecieron en el Castillo mal llamado Libertador, de Puerto Cabello y la presión general de la población logró la liberación.
La lucha por la reconquista de la Democracia, quedó sembrada en sus conciencias y por ello participaron en el asalto a Miraflores, la sublevación que unió a militares y estudiantes.
Relata el General Fernando Ochoa Antich, entre los últimos ministros de la Defensa de la Democracia, que la conspiración comenzó a fraguarse en la Guarnición de Caracas, de manera particular en la Escuela Militar y en los cuarteles San Carlos y Miraflores.
Con demagogia y vergonzoso descaro, los sumisos comunistas plegados al actual narco corrupto régimen militar, comparan la histórica insurrección con el frustrado golpe del 4 de febrero de 1992.
Para ofensa del líder jefe de aquella rebelión contra la tiranía de JVG, Capitán Alvarado, lo equiparan con Hugo Chávez.
Entre los jóvenes universitarios que tuvieron participación en la asonada antigomecista figuraron: Juan José Palacios, Antonio Arraiz, Jóvito Villalba, Miguel Otero Silva, Ernesto Silva Tellería, Jesús Miralles, Germán Tortosa, Francisco Rivas Lázaro, Carlos Irazábal, Carlos Rovatti, Fidel Rotondaro, Rómulo Betancourt, quien logró escapar.
También entre otros militares comprometidos estuvieron los tenientes Rafael Barrios Véliz, Agustín Fernández y Faustino Valero; subtenientes Agustín Fernández y Leonardo Lehmans; alféreces Benjamín Delgado Leffman, Armando Chávez y Eleazar López Wolkmar, hijo del general Eleazar López Contreras, para entonces comandante de la Guarnición de Caracas, quien retomó el Cuartel San Carlos.
Igualmente comprometido estaba el subteniente Santiago Ochoa Briceño, padre del hoy general Ochoa Antich, pero no participó por encontrarse arrestado en Inspectoría del Ejército. 17 años después figuraría en transición a la Democracia, del General Medina Angarita.
Miraflores fue escenario de batalla aquel 7 de abril de 1928. Allí murieron el coronel Aníbal García y el capitán Ramón González.
Etiquetas: Capitán Rafael Telésforo Alvarado Franco, Generación del 28
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home