DECLARACIÓN DE CARACAS Apoyada por Senado Español

Fuente: Noticiero Digital

A propósito de la aprobación en el Senado español de una moción que exhorta al Gobierno de Zapatero a apoyar la Declaración de Caracas, firmada por 400 opositores venezolanos y parlamentarios nacionales de once países el pasado 15 de junio, presentamos el texto de ese documento:

DECLARACIÓN DE CARACAS

Nosotros, parlamentarios de diversos países de Iberoamérica, de distintas ideologías y partidos políticos, reunidos en el Encuentro de Parlamentarios del Mundo por la Democracia, celebrado en Caracas los días 14 y 15 de junio de 2010:

Expresamos nuestra absoluta solidaridad con los pueblos de Iberoamérica en sus luchas por la libertad, la igualdad, la prosperidad y el desarrollo;

Reconocemos a la democracia representativa, fundada en la irrestricta separación de poderes, como el único sistema político cónsono con nuestras tradiciones libertarias, nuestros anhelos y nuestras esperanzas, y exigimos en consecuencia la plena observancia por parte de los gobiernos de nuestra región de los principios establecidos en la Carta Democrática interamericana, de la que todos nuestros gobiernos son firmantes, así como su actuación activa e inexcusable para hacerlos regir, según mandan y ordenan los principios de dicha Carta;

Reafirmamos el respeto a los derechos humanos fundamentales, tales como el derecho a la vida, el derecho a la libre expresión de las ideas, el derecho a la propiedad –sin restricciones que no se encuentren establecidas en nuestras respectivas constituciones- el derecho al justo proceso, y condenamos, por consiguiente, toda violación a dichos derechos, reclamando en donde fueren violados su inmediata y plena restitución, por lo que hacemos nuestras las declaraciones de la CIDH condenando tales violaciones allí donde se perpetren.

Repudiamos toda forma de opresión, de imposición, de persecución y muy en particular el terrorismo de Estado y las formas violentas de lucha y confrontación política; Reconocemos la vida republicana y civilista como la única vía legítima de acción política y de gobierno, y repudiar por consiguiente el militarismo, la autocracia, el populismo, el caudillismo y toda forma autoritaria y dictatorial de gobierno; Propulsamos, en consecuencia, la solución pacífica y consensuada de los conflictos y el respeto irrestricto a la Constitución y las leyes como norma a la que deben ser remitidos todos los conflictos políticos y sociales que surgieren; Promover la mayor pureza, equidad, transparencia y respeto a los adversarios en los procesos electorales, únicas formas legítimas de renovar las autoridades en todos sus niveles, rechazando, en consecuencia y de la manera más categórica, todo intento por impedir la debida renovación de autoridades para entronizar los cargos de gobierno, cualquiera que ellos fueren, más allá de lo establecido constitucionalmente, convencidos de que la democracia se basa en la permanente renovación de las autoridades e impedirlo mediante la fuerza o argucias legales constituye el camino seguro hacia la dictadura.

Demandar el cese de la persecución y el maltrato a los presos políticos, exigiendo su inmediata liberación, en cualquier país donde tales repudiables sucesos tengan lugar, el reingreso de Honduras al seno de la OEA y el fin de la dictadura cubana.

Respaldamos, finalmente, a todas las fuerzas democráticas de nuestros países y muy en particular de los partidos y organizaciones civiles venezolanas en su lucha por impedir la entronización de un régimen dictatorial.

Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que contribuya con la realización del proceso electoral del 26 de septiembre y vele por la fiel observancia de las normas internacionales que rigen en el concierto mundial de las naciones.

En Caracas, a los 15 días del mes de junio del año 2010.