Venezuela: Washington nivela sanciones por apoyo al terrorismo

Dos leyes concretas se enfocan en evitar el desarrollo nuclear y terrorista de Irán

Por: FRANK LÓPEZ BALLESTEROS
Fuente: EL UNIVERSAL

De alguna forma las sanciones que impone Estados Unidos a los "países patrocinadores del terrorismo" son una muerte que comienza por asfixiar a estos gobiernos: van desde medidas económicas restrictivas hasta llegar a un aislamiento internacional.

Washington establece cuatro restricciones "clave" para los países patrocinadores del terrorismo, y a lo largo de los años ha actualizado las sanciones incluso, diseñando leyes específicas para cada nación -como es el caso de Cuba o Irán-, de las cuales por ejemplo se han desprendido medidas como las aplicadas este martes a PDVSA.

El Departamento de Estado elabora anualmente su "Informe sobre Terrorismo" donde evalúa el avance de los países en esta materia y de allí decide qué medidas aprobar de forma unilateral.

Muchas de las penas se aplican sobre la base de la Ley Antiterrorista firmada el 24 de abril de 1996 por el expresidente de EEUU, Bill Clinton.

La Oficina del Coordinador para Contraterrorismo del Departamento de Estado, advierte como primera sanción la prohibición relacionada con las exportaciones y venta de armas (embargo militar) la cual se aplica a los llamados "países patrocinadores del terrorismo" que para Washington son Irán, Siria, Sudán, y Cuba.

Sobre este punto, es de recordar que EEUU decidió desde hace cinco años no autorizar a Venezuela licencias para proveer artículos de defensa y servicios relacionadas con esta actividad por su escasa lucha contra el terrorismo, como advirtió el informe sobre esta rama de 2007 del Departamento de Estado.

Las finanzas y el torniquete

La segunda penalidad consta de controles sobre las exportaciones de productos y tecnología de doble uso, es decir, bienes o servicios que podrían mejorar de forma considerable la capacidad militar o de acción para apoyar el terrorismo.

Tercero, la prohibición de ayuda económica para cualquier fin por parte de EEUU.

La cuarta medida, quizá la más asfixiante, es la prohibición sobre asistencia económica, y esto puede tener repercusiones en la banca internacional y negocios, tomando en cuenta la influencia de EEUU en el Banco Mundial el Fondo Monetario Internacional.

También Washington tendría la potestad de bloquear créditos fiscales a individuos y compañías por ganancias obtenidas en países que patrocinan el terrorismo, así como negar excepción de impuestos a productos exportados a EEUU.

En junio de 2010 el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la resolución 1929, con la que buscaba golpear la industria petrolera iraní debido al avance de su programa nuclear con supuestos fines militares.

La violación de las sanciones de la ONU hacia Irán se podrían sumar a las medidas unilaterales de cada país, y es el caso de lo que ocurre con EEUU.

A parte de su normativa antiterrorista, la Ley Integral de Sanciones, Responsabilidad y Desinversión (Cisada) aprobada en 2010, se enfoca en el sector petrolero de Irán, lo que amplía el alcance de la Ley de Sanciones a Irán (ISA) de 1996, creada para impedir que ese país desarrolle armas nucleares.

Es por la Cisada que se aplicaron sanciones a PDVSA y a otras empresas extranjeras. Entre las penalidades se asoma la imposibilidad de obtener licencias de exportación de tecnología clave para esa industria.