Ramos de la Rosa informó a fiscales federales sobre redes de extorsión en Venezuela

Fuente: Venezuela Factual

Foto y nota de ASERNE: Tomás Sanchez Superintendente Nacional de Valores, supuestamente detrás de red de extorsión

El ex interventor de la Comisión Nacional de Valores, Rafael Ramos de la Rosa, sentenciado a 27 meses de prisión en una cárcel del sur de la Florida el 6 de julio de 2011, ofreció abundante información sobre las operaciones de extorsión en las que participó, junto a sus superiores, de acuerdo a documentos de la corte federal de Miami.

Ramos de la Rosa "asistió substancialmente al gobierno" en las investigaciones sobre las redes de extorsión a banqueros venezolanos en las que participó y por lo cual se declaró culpable en abril pasado, indicó un documento suscrito por el fiscal federal del caso, Richard Gregorie.

"Después de consultar con sus consejeros, el acusado fue interrogado ampliamente sobre todos los aspectos de la investigación en curso, en lo concerniente a la extorsión de propietarios de firmas bursátiles por parte de funcionarios del gobierno en Venezuela, y el movimiento de dinero a los Estados Unidos, el Caribe y a otras partes", indicó el documento.

El fiscal Gregorie escribió la comunicación para solicitar a la corte que redujera sustancialmente la pena indicada por los cánones federales en los casos simliares al de Ramos de La Rosa, debido a su amplia participación y a la abundancia y calidad de la información que suministro.

Según fuentes familiarizadas con la investigación, Ramos de la Rosa suministro información para implicar a los altos directivos de la Comisión Nacional de Valores, especialmente el superintendente Tomás Sánchez.

También suministro información sobre un conocido empresario chavista, que realizó importantes operaciones bursátiles a través de Unovalores, y que fue favorecido por Ramos de la Rosa.

El ex superintendente fue detenido en octubre del 2010 cuando intentaba culminar una operación de extorsión contra Tomás Vásquez, propietario de Unovalores, en un hotel de Miami.

En abril del 2011, Ramos de la Rosa se declaró culpable de acusaciones de extorsión y lavado de dinero, e inició una amplia cooperación con las autoridades federales.