Asilo a Julian Assange por parte del gobierno ecuatoriano es un acto de hipocresía
Fuente: IASW
El presidente ecuatoriano, Rafael
Correa, concedió hoy asilo político al “Wikileaker” Julian Assange en un intento por encubrir su propia imagen
de opresor de la libertad de expresión.
En una de sus características actuaciones dramáticas, Correa convocó a
la izquierda latinoamericana para pedirles que hicieran frente a las posibles
reprimendas internacionales, declarando: “Nadie nos va a aterrorizar!”
En junio, Assange se fugó al
estar aun bajo fianza en Londres después de haber agotado todas las apelaciones
en los tribunales británicos en su esfuerzo por evadir la extradición a Suecia,
donde se enfrentaría cargos criminales de violación y abuso sexual. Assange se
ha mantenido refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, donde, según
informes de prensa, sigue dirigiendo las actividades de “Wikileaks”.
El gobierno británico reaccionó
hoy a la decisión del gobierno ecuatoriano declarando que mantendrá su
obligación legal de extraditar a Assange a Suecia, ya que ha este ha agotado
sus apelaciones en los tribunales locales y es ahora en esencia un fugitivo. El
Ministerio de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña dijo que seguirá buscando
“una solución negociada”, pero aludió a las leyes que rigen la propiedad
diplomática. [http://www.bbc.co.uk/news/uk-19281492] Las autoridades
ecuatorianas por su parte, fingieron indignación ante la sugerencia de que las
autoridades británicas podrían violar la inmunidad de su embajada en Londres.
Aquí se encuentra la hipocresía:
Ecuador, uno de los países con sistemas judiciales más politizados y corruptos
de la región, afirma que Assange no podrá encontrar la justicia en los
tribunales americanos, británicos o suecos. Al defender a Assange, Ecuador se
envuelve en una falsa imagen de equidad y virtuosismo moral; un intento por
encubrir la verdadera naturaleza de un régimen que ha montado un asalto
implacable a las instituciones democráticas del país y a los tribunales
independientes desde que asumió el poder en el 2007. Claramente, Ecuador está
usando el caso Assange como un garrote contra los Estados Unidos, a pesar de
que Assange nunca ha sido acusado en los tribunales de EE.UU.
Ecuador pretende ser un promotor
de la libertad de expresión a través de la protección del fundador de
“Wikileaks”, mientras Correa continua utilizando a los tribunales, las
instituciones y la policía de su propio país para acosar a lo que queda de la
prensa libre ecuatoriana.
En el momento en que Assange
entró en la embajada de Ecuador, Correa ya había recibido fuertes críticas
internacionales por sus ataques a la prensa libre. Uno de sus primeras agresiones
contra los medios se produjo en el 2008, cuando ordenó a la policía que ocupara
las estaciones de dos populares canales
de televisión, así como otras 200 empresas pertenecientes al Grupo Isaías, el
cual él considera como uno de sus enemigos políticos.
[http://cpj.org/2009/02/attacks-on-the-press-in-2008-ecuador.php] Otro
caso involucró una demanda interpuesta por el personal de Correa el año pasado
contra los propietarios y el director del periódico El Universo de Guayaquil,
por la publicación de una columna critica. Las cortes manipuladas por Correa
fielmente declararon culpables a los miembros de El Universo, ordenando una
indemnización de $40 millones de dólares a su favor, un resultado que muchos
consideran fue redactado por el propio abogado jurídico del presidente.
Incluso desde que el circo de
Assange trajo el escrutinio público al triste historial de Correa, el 28 de
julio su gobierno anunció que dejaría de emitir contratos públicos a los
periódicos y a las estaciones de televisión “mercantilistas”. Milton Coleman,
presidente de la Asociación Interamericana de Prensa (SIP) y editor del
Washington Post señaló que las políticas para beneficiar a algunos medios de
comunicación y castigar a otros “violan las normas regionales de protección al
periodismo independiente”. La SIP también ha expresado su gran preocupación
sobre el hecho de que Correa ha amenazado con cerrar la Fundación Andina para
la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios) que ha presentado querellas
formales contra las autoridades regionales en relación a los abusos contra la
libertad de prensa.
En un ataque aun más descarado,
realizado a finales del mes pasado, los reguladores laborales del gobierno
ecuatoriano allanaron las oficinas quiteñas de la revista Vanguardia- incautando
computadores y otras pertenencias. El dueño de la revista caracterizo a la
acción como un acto de represalia política. Reporteros sin Fronteras señaló que
el acto efectivamente silenció a la publicación semanal conocida por su
periodismo de comunicación y señaló en un comunicado que “la lista de medios de
comunicación que han sido cerrados o embargados continua creciendo”.
Meritoriamente, un liberal
incondicional perteneciente al Senado de los Estados Unidos, Patrick Leahy de
Vermont, ha criticado abiertamente las maniobras de Correa en su intento por
“silenciar a sus críticos” en los medios de comunicación dificultando las
tareas de vigilancia a la libertad de expresión en la región.
“Los ataques personales y las
acusaciones de naturaleza inflamatoria dirigidos por altos funcionarios del
gobierno debilitan el discurso democrático y no tienen lugar en un país con un
largo historial de compromiso con las libertades civiles”, dijo Leahy en un
comunicado dirigido al Senado a principios de este mes.
Al pavonearse por el escenario
mundial como defensor de Assange, Correa espera blanquear su imagen de
autócrata opresivo. Al fabricar un enfrentamiento con Gran Bretaña y los
Estados Unidos, se está preparando para reemplazar al ahora enfermo líder
venezolano, Hugo Chávez, como el líder incorregible de la izquierda
latinoamericana.
La triste realidad es que detrás
de todo este asunto se encuentras dos hipócritas inadaptados tratando de
encubrir la verdadera naturaleza de sus programas sórdidos y egoístas. Se hará
justicia si se les hace responder por estos abusos.
Roger F. Noriega fue embajador
ante la Organización de Estados Americanos de 2001-2003 y Subsecretario de
Estado de 2003-2005. El es un investigador visitante en el American Enterprise
Institute y director ejecutivo de Vision Americas LLC, que representa a clientes de EE.UU. y
extranjeros y contribuye con www.interamericansecuritywatch.com
Etiquetas: Roger Noriega
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home