Los mitos que Chávez sembró.

Por: Lorenzó García Tamayo

Número uno: “Ser Rico es malo”

Este es uno de los Países más ricos del mundo ¿Por qué no habrían de ser ricos también todos sus habitantes? Ser rico no es malo, ni es nocivo, mucho menos contraproducente. Lo malo es, que sus dirigentes utilicen la riqueza del País, para lucrarse ellos y sus camarillas, mientras el común denominador de la población se come un cable. 

Ya sabemos cómo viven todos los familiares de Chávez. Sus padres, sus hermanos, sus hijos, y toda su parentela política, navegan en opulencia y abundancia al mejor estilo de los multimillonarios. Dándose lujos que nunca tuvieron, ahora tienen mansiones, carruajes, ropas y joyas, que ostentan viajando por todo el mundo, mientras someten a la población al tormento de tener que soportar el terror de la muerte y la pobreza, tal y como lo indican los más altos índices de inseguridad e inflación del mundo entero, en el País más rico del mundo. Ni Chávez ni su familia nunca hicieron colas para poder obtener un paquete de harina pan. 

Ser rico no es malo. Malo es lo que hizo Chávez, sometiendo a la mayoría, a la insana costumbre de ser pobres, porque según él, ser rico es malo, machacando hasta el cansancio día tras día, la cantaleta de que son los ricos los que hacen más pobres a los pobres, mientras su grupo y su familia, sin hacer colas, siempre tuvieron y mantienen la nevera full, viajan a donde les da la gana, y si les toca enfermarse, jamás van a un hospital público ni pisan un CDI, porque si eso ocurre, se van al exterior, o se internan en la mejor clínica privada. 

Chávez lo sabía, y toda su familia lo disfruta. SER RICO ES BUENO. Bolsas quienes se lo creyeron, y aún siguen creyendo que ser rico es malo. Rebélate, sacúdete ese lastre que te endilgaron un aciago día, e inicia el trillado por la senda de la resistencia civil.