Los Colombianos quieren ‘paz’ pero no confían en que Santos pueda conseguirla
Por: Roger Noriega
Fuente: IASW
El asesinato de 11 soldados del ejercito colombiano el pasado 14 de abril en la provincia del Cauca a manos de las FARC, parece haber agotado la paciencia del país con el proceso de paz. Un proceso que lleva casi 3 años y que ha sido la piedra medular de la política del presidente Juan Manuel Santos en su segundo mandato. Dados los resultados de una encuesta publicada esta semana, todo apunta a que Santos deberá escoger entre salvar el proceso de paz o salvar su credibilidad.
De acuerdo con una encuesta realizada por Ipsos del 23 al 26 de abril, el 69% de los colombianos no creen que los diálogos de paz en La Habana puedan producir un acuerdo que termine con el conflicto armado de medio siglo. Noventa y tres por ciento de los encuestados tiene una opinión negativa de las FARC, tres puntos porcentuales más desde el ataque en Cauca.
Sólo el 27% cree que las negociaciones deben terminar de inmediato, mientras que el 64% cree que deben continuar con un límite de tiempo. Aunque eso podría ser visto como una luz de esperanza para los partidarios de los diálogos de paz, una gran mayoría rechaza las demandas esenciales de las FARC. Por ejemplo, un porcentaje nunca antes registrado (79%) objeta la participación de las FARC en el proceso político y el 89% cree que los líderes de las FARC deben pagar con prisión “por sus crímenes.”
Después de la masacre en Cauca, Santos fue confrontado por manifestantes que denunciaron los ataques de las FARC y el proceso de paz. Él se ha comprometido a imponer una fecha límite para las negociaciones, mismas que se han prolongado por mucho más tiempo de lo que prometió cuando se puso en marcha el proceso en septiembre de 2012. Sin embargo, Santos no ha hecho una declaración pública sobre este tema durante varias semanas.
Los datos de la encuestadora Ipsos dan a Santos mucho que reflexionar en cuanto a lo que debe hacer. Sesenta y siete por ciento de los encuestados describió la situación económica como “mala” o “muy mala”. El 77% cree que Colombia va por mal camino, la cifra más baja desde que su administración lidió incorrectamente con una huelga de agricultores en 2013 . Más aun, alrededor de un tercio de los encuestados cree que las condiciones empeorarán en los próximos seis meses.
En junio pasado, el presidente Santos pudo maniobrar con bajos índices de popularidad al preponderar su oferta histórica para la paz. Bajo el lema “Queremos la paz”, sus partidarios se aglutinaron para que Santos ganara un segundo periodo como presidente por cuatro años más. Hoy, su índice de aprobación se ha desplomado a 29%, empatando el numero más bajo desde que asumió el poder hace 57 meses. Peor aún, los colombianos desaprueban el trabajo que Santos está haciendo como presidente por un margen de 72% a 25%. El proceso de paz que Santos utilizó para ganar la reelección, hace menos de un año, se ha convertido en un lastre político.
Por un margen de 81% a 19%, los colombianos creen que Santos no ha cumplido las promesas que hizo para ganar su segundo mandato. En temas económicos y sociales clave, Santos recibe marcas incluso más bajas que el manejo del proceso de paz. Los encuestados desaprueban su gestión del desempleo, la salud, la seguridad y la justicia en una proporción mayor de 3 a 1.
Santos ha sido un defensor tenaz del proceso de paz y los colombianos siguen favoreciendo el principio de una salida negociada a la guerra. No obstante, el pueblo Colombiano tiene serias dudas sobre el proceso de paz y sobre el manejo de Santos de la seguridad nacional y la prosperidad. El pueblo quiere la paz, pero es evidente que no confían que Santos pueda conseguirla.
A la luz de este profundo escepticismo popular, Santos no tiene la credibilidad para salvar los diálogos de paz. Está por verse si puede rescatar su presidencia.
Etiquetas: FARC
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