Islamismo y antisemitismo en América Latina

Por: Jose I. Rodriguez 

Fuente: Mundo Defensivo

“Reyezuelos dictatoriales, con complejo de autoestima, como el extinto Chávez en Venezuela y su aprendiz de brujo Maduro el usurpador, han sembrado de antisemitismo las conciencias de muchos”  

Venimos alertando, hace años, de los síntomas de islamización en las sociedades de Hispanoamérica, buena parte de las cuales se han contagiado de la más terrible enfermedad que una sociedad puede adquirir, a saber, el sincretismo político-religioso antisemita. Aglutinado con la llamada revolución bolivariana -y aderezada con sangrantes desigualdades- el islamismo fundamentalista se infiltra en las diferentes sociedades hispanas. Las capas más pobres, ansiosas de venganza y poder, piensan que verán sus deseos cumplidos aliándose con estos nuevos conquistadores de corte islámico radical. 

Tenemos que advertir que estos elementos político-religiosos tienen en común algo más que evidente: su odio visceral y patológico a Israel, su odio a la cultura de Occidente. La mezcla de un debilitado cristianismo materialista con elementos autóctonos culturales como el indigenismo, muy activo políticamente, amplifican los efectos adversos de esta situación. 

Estamos conscientes de que el antisemitismo militante no es solo de este tiempo, ni de una nación o continente en particular, pero lo que está pasando en la mayor parte del mundo latino, no puede dejarnos indiferentes. Las alertas se encendieron, hace varios años, pero no dieron importancia al peligro que anunciaban. Los “cohetes Kassan” están cayendo en este nuevo campo de entrenamiento de los grupos terroristas latinos y sus homólogos del terrorismo islámico. Dichos artefactos, de alcance ideológico intercontinental, llegan a las áreas sociales menos formadas de todo el mundo y en particular de la profunda América Latina. Un liderazgo de falsos libertadores, de estilo bolivariano, está destruyendo la belleza natural, esquilmando las materias primas y deformando el encanto personal que tienen las gentes de Hispanoamérica. Los falsos libertadores bolivarianos, enfatizamos falsos, están contaminando las mentes poco cultivadas, con el ya nombrado sincretismo político-religioso antisemita, aglutinando odio y exportando infamia a todo el continente latino. Reyezuelos dictatoriales, con complejo de autoestima, como el extinto Chávez en Venezuela y su aprendiz de brujo Maduro el usurpador, han sembrado de antisemitismo las conciencias de muchos. 

La lista de los ya nombrados reyezuelos dictatoriales da cabida a muchos estrafalarios personajes. Otro ejemplo, de los muchos que podríamos citar, es Evo Morales en Bolivia, que sigue la misma estela cubano-chavista de destrucción de su propia sociedad. El demacrado Castro, en el corredor de la muerte desde hace muchos años, y su hermano han sincretizado todos sus males por medio del Palo Mayombe, brujería con denominación de origen, mezclada con un rancio socialismo que ha llenado de miseria la isla cubana. Aspirando al rango de aprendiz de la intolerancia, Rafael Correa en Ecuador mantiene el poder con las instrucciones y los ritos que le trasmitió su “maestro de la oscuridad” Chávez. La Nicaragua de Ortega también ha puesto todos los medios de sus ruinosas infraestructuras para que el violento islamismo penetre en su maltrecha sociedad. 

Queda confirmado que la islamización fundamentalista de Hispanoamérica comenzó desde que los gobiernos bolivarianos socialistas se aliaron con los “moderados islamistas”, tales como Irán, exportadores directos de odio a Israel. ¿Qué consecuencias traerá todo esto?