La Ley Magnitsky impone sanciones a 52 funcionarios de 3 países

Fuente: Mercado Militar

La Ley Magnitsky impone sanciones a 52 funcionarios de 3 países

El gobierno canadiense utilizó por primera vez el viernes 3 de noviembre una nueva y poderosa arma legal, la Ley Magnitsky, imponiendo sanciones a 52 funcionarios de tres países: Venezuela, Sudán del Sur y Rusia.

La nueva ley lleva el nombre del abogado ruso Sergei Magnitsky, quien murió en prisión después de que fue arrestado por un presunto fraude fiscal. El empresario con sede en el Reino Unido que representó, nacido en Estados Unidos Bill Browder, dice que Magnitsky fue asesinado por funcionarios que querían ocultar el hecho de que habían robado $ 230 millones en impuestos pagados por su empresa, Hermitage Capital, el mayor inversionista extranjero en Rusia.

Desde entonces, Browder se ha dedicado a persuadir a los países occidentales para que aprueben una versión de una ley de los EE. UU. con el nombre de su ex abogado.

La ley originalmente estaba dirigida a los funcionarios rusos corruptos que estaban más estrechamente involucrados en el caso Magnitsky, pero también permite la aplicación de sanciones contra funcionarios corruptos de cualquier gobierno.

Si bien Canadá siempre ha tenido facultades discrecionales para sancionar a cualquier gobierno que considere adecuado, la Ley Magnitsky va más allá, otorgando poderes al gobierno para congelar activos propiedad de individuos, si el gobierno cree que están involucrados en corrupción, lavado de dinero y abusos de derechos en su territorio.

La familia de denunciantes rusos agradece a Canadá por hacer frente a la corrupción mundial con la Ley Magnitsky. Putin califica la adopción de la nueva Ley Magnitsky por parte de Canadá como un juego de azar político.

Aplicación de la ley

La nación más nueva del mundo, Sudán del Sur, es la primera nombrada por Canadá en virtud de la Ley Magnitsky.

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, a quien Canadá acusó de llevar a su país “más profundamente a la dictadura”, y muchos de sus altos funcionarios ya fueron sancionados por Canadá el 22 de septiembre por su papel en destruir la democracia y el estado de derecho en el país.

Esas sanciones tenían como objetivo castigar a los principales políticos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela después de que respondieran a su derrota en las elecciones legislativas al despojar al Congreso venezolano de sus poderes y transferirlos a una “asamblea constituyente” repleta de partidarios leales