“Extendiendo la Corrupciòn sobre la Tierra" Una acusación no clara, con un claro mensaje

Por: Nargess Tavassolian

Irán es un lugar peligroso para ser periodista, un hecho que está bien documentado, y una de las formas más comunes en que el poder judicial castiga a los periodistas es presentando cargos graves, a menudo relacionados con delitos contra la seguridad nacional.

Debido a que muchos de los delitos relacionados con la seguridad de Irán están definidos de manera deficiente y ambigua, también lo están los cargos relacionados con estos delitos, y este escenario a menudo significa que los periodistas y activistas se enfrentan a duros castigos y persecución. Antes de la revolución de 1979, Pahlavi mantuvo una mezcla de leyes seculares e islámicas, pero después de la revolución, el gobierno islámico adoptó un nuevo código penal basado en la sharia. Adoptó nuevos cargos, algunos de ellos vagamente definidos, sin aclarar el lenguaje ni actualizarlo para un contexto moderno. Como resultado, las definiciones de algunos de estos cargos en realidad se desvían de sus significados literales.

Para los periodistas y activistas, algunos de los cargos más peligrosos incluyen moharebeh y efsad fel arz , traducidos literalmente como “hacer la guerra contra Dios” y “propagar la corrupción en la tierra”. Hasta 2013, estos cargos estaban contemplados en un artículo y se consideraban un solo delito. Estipulaba que cualquier persona que recurriera a las armas para causar terror y miedo o violar la seguridad pública y la libertad era un mohareb —una persona culpable de moharebeh— y culpable de mofsed fel-arz.(literalmente una persona que “esparce corrupción en la tierra”). Pero desde que se adoptaron las enmiendas en 2013, la difusión de la corrupción se ha considerado un delito en sí mismo y, por lo tanto, se define por separado. Al mismo tiempo, se introdujo una brecha significativa entre la definición de efsade fel arz y cómo se reconoce en la ley. Los jueces abusan regularmente de los dos cargos para atacar a los críticos pacíficos, y debido a que "difundir la corrupción en la tierra" es particularmente vago, se volvió fácil para los jueces dictar sentencias de acuerdo con este cargo.

Moharebeh (Alá) significa literalmente hacer la guerra contra Dios, pero según el artículo 279 del código penal se describe como “apuntar con un arma a la vida, la propiedad o el honor [refiriéndose a los miembros femeninos de la propia familia] de las personas o causar terror como genera inseguridad”. El artículo 281 del código penal estipula que el cargo de moharebeh se aplica a los bandidos, ladrones y contrabandistas que recurren a las armas y perturban la seguridad pública o la seguridad de las carreteras.

Además, según el artículo 504, un mohareb (una persona que comete moharebeh ) incluye a cualquiera que aliente efectivamente a los combatientes, o aliente a los que sirven en las fuerzas armadas a rebelarse, escapar, rendirse o desobedecer las órdenes militares con la intención de derrocar al gobierno o derrotar a las fuerzas nacionales que luchan contra el enemigo.

El castigo por moharebeh incluye: ahorcamiento, crucifixión, amputación de la mano derecha y el pie izquierdo o destierro. El juez designado para tratar los casos de moharebeh tiene facultades discrecionales para decidir qué castigo se aplicará.

Al hablar en plataformas internacionales, los representantes de Irán han argumentado con frecuencia que el cargo de moharebeh se usa exclusivamente para delitos terroristas. Pero esto no es cierto: desde el establecimiento de la República Islámica, el cargo de moharebeh se ha utilizado contra muchos activistas políticos, culturales y de derechos civiles pacíficos, así como contra periodistas y críticos del régimen.

Farzad Kamangar, docente y sindicalista kurdo que nunca había participado en ninguna actividad armada, fue ejecutado por cargos de moharebeh en enero de 2014. Tampoco habían participado nunca en ninguna actividad armada. Las autoridades ejecutaron al periodista y activista de derechos civiles Yaghoub Mehrnahad en julio de 2008 por el mismo cargo. Hay muchos más ejemplos.

Según el artículo 286 del nuevo código penal, un mofsed (una persona que comete efsad fel arz ) se refiere a una persona que “comete delitos contra la integridad física de las personas, delitos contra la seguridad nacional, perturba la estructura económica del país, comete incendios y destrucción, distribuye sustancias venenosas o peligrosas, o dirige centros de corrupción y prostitución”. El cargo también se refiere a la escala del daño causado: el acusado puede ser declarado culpable de propagar la corrupción si él o ella “provoca una alteración grave del orden público del país o causa un daño extenso a la integridad física de las personas o de las personas privadas y públicas”. propiedad, o propague la corrupción o la prostitución a gran escala”. El castigo por efsad fel arzes ejecución.

Mousa Barzin Khalifeloo, un jurista iraní radicado en Turquía, argumenta que el delito de “propagación de la corrupción en la tierra” está tan ampliamente definido que, en consecuencia, lo que se considera delictivo se amplía y se dirige a un mayor número de personas. Una de las ambigüedades, según Barzin, es la frase "a gran escala". Dice que no se han establecido criterios para explicar lo que esto significa y cuestiona la vaguedad del término. “¿Significa la severidad de la acción tomada o la naturaleza extrema del mensaje entregado?” él pide. Además, cuestiona si la frase se refiere a la cantidad de personas a las que el mensaje o actividad podría llegar o impactar. ¿O se refiere a la sostenibilidad de dicho mensaje y cómo podría afectar a la sociedad durante un período prolongado de tiempo?

Barzin dice que, según el código penal, el castigo por delitos contra la seguridad nacional y difundir mentiras es de un máximo de 10 años de prisión. Pero el artículo 286 estipula que si estos delitos se cometen a “gran escala” y provocan trastornos, daños o corrupción, como se mencionó anteriormente, equivalen a efsad fel arz , y pueden dar lugar a la pena de ejecución. Las autoridades judiciales con frecuencia formulan la acusación de “difundir mentiras” contra la prensa, lo que significa que representa un riesgo no solo para estos profesionales, sino para la sociedad en general porque puede resultar en la divulgación de información vital.

Barzin también dice que la ley no define adecuadamente el término “seguridad” y, como resultado, “jueces independientes pueden usarlo fácilmente contra críticos pacíficos”.

Justificando la represión

Entonces, ¿por qué se ha separado esfad fel arz de moharebeh en el nuevo código penal? “Parece que el gobierno está tratando de encontrar una base legal para suprimir la disidencia pacífica”, dice Barzin. Él dice que aunque los jueces deben proporcionar pruebas para dictar el cargo de moharebeh , este no es el caso de efsad . Las autoridades no tienen que probar que se desplegaron armas o que se llevaron a cabo “actividades armadas”. Necesitan pocas pruebas, si es que las necesitan, para presentar cargos muy graves contra activistas de la sociedad civil y trabajadores de los medios de comunicación, cargos que incluso pueden dar lugar a la ejecución. Cuando el nuevo código penalfue presentado en 2013, las autoridades alegaron que era más completo y más avanzado. En algunos casos, esto es cierto, por ejemplo, con respecto a la práctica de la ejecución de menores. Sin embargo, en otros sentidos, el código se ha vuelto más problemático , especialmente para los periodistas .

Como argumenta Barzin —y como saben los periodistas que han estado encarcelados durante largos períodos, o las familias de activistas y periodistas que han sido ejecutados como resultado de estos cargos—, en lugar de proteger la seguridad nacional y pública y los derechos de los ciudadanos, estas leyes silenciar la disidencia y tomar medidas enérgicas contra aquellos que intentan difundir información y noticias al público en general, o que intentan hacer cambios a través de actividades pacíficas.