VENEZUELA: ESTADO NARCO-CRIMINAL DE LA MANO DEL CÁRTEL DE LOS SOLES

Por: José Sánchez López/Corresponsalías Internacionales/Grupo Sol Corporativo

Fuente: La Opinion de Mexico

*Rivaliza con el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación

*Trafica 350 toneladas de cocaína al año, con valor de 9 mil millones de dólares

*Pasó de simple cómplice a líder de las operaciones en el trasiego de droga

*El tráfico de drogas representa el 8.5 del Producto Interno Bruto

*Estados Unidos ofrece 15 millones de dólares por Maduro, igual que por El Mayo

Al acabar con la industria petrolera y agrícola de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, mandatario de Venezuela, hizo del narcotráfico su principal fuente de financiamiento para paliar la grave crisis económica en la que hundió a su país.

Lo anterior quedó al descubierto luego de una investigación hecha por la Organised Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), en colaboración con el portal de noticias venezolano Armando Info y el Miami Herald, en la que puso en evidencia la compleja red de narcotráfico que implica a altas esferas del régimen venezolano y a miembros de las Fuerzas Armadas del país.

La investigación surgió luego de una filtración masiva de documentos, se sumó a una serie de entrevistas con ex funcionarios de la dictadura chavista, agentes de la DEA y ex miembros de la operación criminal, para construir un detallado panorama de la implicación del Cártel de los Soles en el tráfico de cocaína, cuyo líder es el mismo Maduro Moros.

Los documentos filtrados de la Fiscalía de Colombia, analizados y verificados mediante entrevistas adicionales y otros informes independientes, revelaron que militares venezolanos, en asociación con guerrillas colombianas y grupos criminales, están directamente involucrados en las operaciones de narcotráfico.

De acuerdo a las pesquisas, Venezuela es actualmente un importante puente en las exportaciones mundiales del narcotráfico, desde donde salen entre 250 y 350 toneladas al año, con un valor en el mercado negro de entre 6 mil 250 millones y 8 mil 750 millones de dólares.

El reporte señala que el involucramiento en el narcotráfico por parte de Caracas ha evolucionado, pasando de un rol de simple complicidad, es decir prestarse al soborno para hacerse disimulado, a ser actores activos y líderes de las operaciones.

Mike Vigil, ex jefe de Operaciones Internacionales de la DEA, al referirse a la dictadura en Venezuela, la calificó como la que está ahora a cargo de manera directa, involucrada en el transporte y distribución de la droga, no sólo a Estados Unidos, sino también a Europa.

Los informes de inteligencia colombianos describen al Cartel de los Soles como una “amenaza activa” y detallan su presencia en los Departamentos fronterizos de Vichada, Guainía y Arauca, donde ha establecido rutas marítimas de transporte de cocaína hacia Estados Unidos y Europa, además de incursionar en el contrabando de oro y otros minerales.

El Cartel de los Soles, autodenominado así por la insignia que llevan los generales venezolanos, se ha convertido en el actor principal del tráfico de drogas, y es considerado por las autoridades colombianas a la par de los cárteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.

En informes ultrasecretos, el ejército de Colombia señala que la plataforma es utilizada para el movimiento de contrabando, tráfico de armas y producción de estupefacientes que son llevados a Venezuela y desde allí se distribuyen a otras regiones.

Catatumbo, una subregión colombiana que limita en la frontera con Venezuela, zona de alta concentración de plantaciones de hojas de coca, cuya producción, según fuentes de la DEA, ha aumentado debido a un cambio estratégico en la política de erradicación de cultivos ilícitos de Colombia bajo la administración del presidente Gustavo Petro, es el epicentro de esa red criminal.

De acuerdo a un informe sobre Colombia publicado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, cada hectárea de hojas de coca cosechada tiene un rendimiento promedio de 7.9 kilogramos de cocaína en polvo.

“Esas cifras sugieren que sólo en 2022, más de 330 toneladas transitaron a través del estado Zulia, desde la región del Catatumbo, una cifra alarmante dado que Catatumbo suministra sólo alrededor del 60% de las drogas que ingresan a Venezuela, en tanto que el resto es transportado por ríos en la región de los llanos y la región selvática en el sur”, precisa el informe.

Ante ese panorama, el gobierno estadounidense ha presentado cargos contra altos funcionarios del régimen venezolano, incluyendo a Maduro Moros, líder del Cartel de Los Soles, por el que ofrecen como recompensa 15 millones de dólares, lo mismo que por Ismael El Mayo Zambada, líder del Cártel de Sinaloa.

Entre los demás solicitados por la justicia estadounidense se encuentran otros 13 funcionarios venezolanos de alto rango, incluyendo al diputado chavista Diosdado Cabello Rondón, considerado como la segunda figura más poderosa del régimen.

En la lista también figuran el ex vicepresidente Tareck El Aissami, el ministro del Interior, Néstor Luis Reverol Torres; el ex jefe de inteligencia militar Hugo ‘El Pollo’ Carvajal, detenido y extraditado a Estados Unidos el 19 de julio de 2023, y el general Clíver Antonio Alcalá Cordones.

A pesar de que estos cargos han sido interpretados por algunos como políticamente motivados, especialmente durante la administración de Donald Trump, la filtración colombiana y las pruebas adicionales han disipado esas dudas.

El análisis de la situación pone de manifiesto que la dependencia económica del régimen venezolano del narcotráfico, creció en respuesta al colapso de la industria petrolera y las sanciones estadounidenses, por lo que los ingresos del narcotráfico se convirtieron en fuente esencial para la economía venezolana, de tal manera que el tráfico de drogas representó el 8.5% del producto interno bruto del país.

En el trasiego de la droga, los informes detallan tres ejes principales de operaciones: el Eje Catatumbo, el Eje Arauca y el Eje Vichada-Orinoco, cada uno con sus propias rutas y métodos para la movilización de drogas.

Desde el Eje Catatumbo, las drogas son transportadas a través de ríos hacia Venezuela y luego a otros destinos internacionales; en el Eje Arauca, las drogas transitan por una región propensa a inundaciones y son transportadas a menudo a través de ríos hasta puntos de distribución y exportación y el Eje Vichada-Orinoco, aunque más pequeño, también contribuye significativamente a la cadena de suministro de drogas.

Douglas Farah, presidente de IBI Consultants, dijo que todo es administrado por las mismas facciones poderosas que tienen el control del Estado, “convirtiendo el narcotráfico en un instrumento del mismo para sobrevivir”.

De acuerdo con el reporte, este escenario pone al régimen de Maduro en el centro de un complejo debate sobre la legitimidad y las acciones necesarias para enfrentar el desafío que representa el narcotráfico a nivel mundial, lo que complica aún más las relaciones diplomáticas y plantea la interrogante de si, al dialogar con el régimen de Maduro se estaría negociando con narcotraficantes que han tomado control del Estado.

Esa hipótesis se refuerza por los volúmenes de drogas detectados y las implicaciones de que la realidad podría estar más cerca de un Estado narco-criminal, que de un gobierno involucrado ocasionalmente en actividades ilícitas.

El informe de la consultora de seguridad IBI Consultants, especializada en crimen organizado transnacional en América Latina, apoya esta visión, describiendo al Cartel de los Soles como una “importante organización de narcotráfico, altamente criminalizada que opera desde los niveles más altos del gobierno venezolano”.

Uno de los ex agentes de la DEA dijo que, dada la estructura jerárquica de las fuerzas armadas, donde cada decisión viene directamente desde arriba, “no hay duda de que los máximos comandantes y el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, están directamente involucrados”.

EL CARTEL DE LOS SOLES

El Cartel de los Soles es el término usado para describir los oscuros grupos dentro del ejército de Venezuela, implicados en una amplia gama de actividades criminales, incluyendo el contrabando de gasolina, la minería ilegal y otros esquemas de corrupción, entre los que se destaca el narcotráfico.

No es un grupo jerárquico, sino una red de células dentro de las ramas castrenses principales: el ejército, la marina, la fuerza aérea y la Guardia Nacional, desde los rangos más bajos hasta los más altos, que funcionan básicamente como organizaciones del narcotráfico.

Para ello se han aliado con los 10 grupos criminales que dominan el hampa en Venezuela.

La frontera con Colombia es el hogar de los grupos guerrilleros binacionales; bandas mineras conocidas como sindicatos se han asentado en las regiones ricas en oro al sur y el este del país; redes de narcotraficantes que han tomado el control de las rutas y puntos de embarque en el norte y los centros urbanos de todo el país.

La banda de Yeiko Masacre ha evolucionado desde sus inicios como célula de una de las mafias más antiguas del estado Zulia (Los Meleán), hasta llegar a convertirse en una de las bandas extorsivas más peligrosas en uno de los estados más populosos y de mayor importancia económica del país.

La organización liderada por Wilexis Acevedo, alias “Wilexis”, lleva ya casi una década abriéndose paso hacia la cúspide de la jerarquía criminal en Petare, un extenso distrito a las afueras de Caracas, plagado de pobreza e inseguridad, pero que ofrece amplias oportunidades para el crimen.

El Tren de Guayana es uno de los sindicatos más antiguos del estado Bolívar, que evolucionó desde banda urbana dedicada a la extorsión a grupo que controla el territorio y minas de oro en los municipios de Roscio y El Callao.

La banda fundada por Deiber Johan González, alias “Carlos Capa”, se ha posicionado como el actor criminal más poderoso entre las muchas bandas depredadoras que operan en la región de Valles del Tuy, en el estado Miranda, en el centro-norte del país.

La Organización R (OR), es un sindicato asentado en el municipio Sifontes, en el estado Bolívar, al este del país. Al menos desde 2019, ha expandido su presencia en las minas de oro que rodean la población de Tumeremo, controlando y lucrándose de las actividades de minería ilegal.

Las Fuerzas Bolivarianas de Liberación (FBL), también conocidas como Fuerzas Patrióticas de Liberación Nacional (FPLN) o por el apodo de los “Boliches”, es un grupo guerrillero originario de Venezuela, surgido en los años 80. Durante las dos últimas décadas, ha actuado como defensor de la “Revolución Bolivariana”, emprendida por el expresidente venezolano Hugo Chávez.

El Sindicato de Las Claritas es otra de las mafias mineras más antiguas y consolidadas del estado Bolívar. También se lo conoce con los alias de sus líderes, Juan Gabriel Rivas Núñez, alias “Juancho”, y Yohan José Romero, alias “Johan Petrica”.

El Frente Acacio Medina es un grupo insurgente que desertó en 2016 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), durante el proceso de paz que esa guerrilla negoció con el gobierno colombiano. Desde su escisión de las FARC, ha centrado la mayor parte de sus fuerzas y operaciones en Venezuela, y hoy es la facción más poderosa de las ex-FARC Mafia que opera en el país.

El Tren de Aragua pasó de ser una pandilla carcelaria local al grupo criminal más poderoso de Venezuela y una verdadera amenaza para la seguridad transnacional.

El Ejército de Liberación Nacional es un grupo insurgente fundado en 1964, como una guerrilla colombiana en la ideología marxista-leninista. En los últimos años, ha evolucionado para convertirse en un grupo armado binacional que también controla extensos territorios y economías criminales en Venezuela.