Cooperación regional, esencial para combatir a Hizbulá en Latinoamérica
Por: Antoni Belchi / Voz de América / editado por Diálogo
Fuente: Dialogo - Revista Militar Digital
Los combatientes chiítas iraquíes del grupo armado Brigadas de Hizbulá, respaldado por Irán, desfilan para conmemora el Día Internacional de Al-Quds (Jerusalén) en Bagdad, el 31 de mayo de 2019. (Foto: Ahmad Al-Rubaye / AFP)
La III Cumbre Hemisférica Contra el Terrorismo, puso de manifiesto la necesidad de que los países de la región trabajen conjuntamente para acabar con las células terroristas, especialmente del movimiento libanés Hizbulá y de la guerrilla colombiana Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Los Estados que suscribieron el documento, entre ellos Argentina, Colombia y los Estados Unidos, evidenciaron su “preocupación por las actividades que sus redes [de las organizaciones terroristas] continúan realizando en algunas áreas del hemisferio occidental”.
Hablando sobre las consecuencias de Hizbulá en Latinoamérica, Diego Mella, experto en antiterrorismo e inteligencia militar, dijo a la Voz de América que la presencia de estos grupos “no es nada nuevo” en esta zona. Además, alertó del “triángulo” formado en las fronteras de Venezuela, Colombia y Brasil donde “solo impera la ley de la violencia”.
Mella, quien ha ejercido como capitán en el cuerpo de policía del condado de Miami-Dade, Florida, y ahora es analista militar, considera que una coalición entre Brasil, Colombia y los Estados Unidos, sería lo mejor para acabar con “las guerrillas y los narcotraficantes”.
Es la misma postura de Luis Fleishman, profesor de sociología en Palm Beach State College, pero advierte que esa coalición debería ser “defensiva o preventiva”.
Fleishman aboga por “una coalición importante para prevenir la expansión de esos grupos” que, según los informes, están presentes en varios países de Latinoamérica.
Preocupación por Hizbulá en Venezuela
Fleishman, que fundó el Centro para la Democracia y la Investigación Política en el condado de Palm Beach, recuerda que el informe firmado en la cumbre del 20 de enero de 2020 en Bogotá, Colombia, destaca el “bastión de grupos terroristas” que llevan bastante tiempo en Venezuela.
Por eso, subraya, es indispensable que se haga un seguimiento exhaustivo, y crear acciones conjuntas para lograr un cambio en la región.
Un problema desde hace años
Desde los años noventa, Hizbulá tiene presencia en Latinoamérica. Las milicias financiadas y entrenadas a través de la Guardia Revolucionaria iraní empezaron a implantarse a través de la denominada “triple frontera” entre Argentina, Brasil y Paraguay.
Su desarrollo en la región tuvo una segunda fase unos años más tarde, cuando el entonces presidente venezolano Hugo Chávez llegó al poder.
Joseph Hage, analista político especializado en temas de Medio Oriente y Terrorismo, explicó a la VOA que el padre de Tareck El Aissami, actual vicepresidente sectorial de Economía y Ministro del Poder Popular para Industrias y Producción Nacional de Venezuela, “abrió una línea de comunicación a Hugo Chávez con el presidente de Siria Bashar al Asad”, lo que le permitió tener contacto con Irán y con Hizbulá en el Líbano.
“Hizbulá aprovechó la presencia de libaneses chiís y tuvo la ayuda de Venezuela con la expedición de documentación, residencias y pasaportes, para poder trasladarse por Latinoamérica”, comentó.
El modus operandi de Hizbulá en Latinoamérica acostumbra seguir los mismos patrones de conducta: “Establece vínculos comerciales en Latinoamérica y ahí se da el tráfico de drogas, lavado de dinero, suministro de armas… cualquier tipo de negocio ilícito”.
Fleishman está convencido de que un “cambio de régimen en Venezuela es crucial para dejar de estimular la presencia de estos grupos” en el país.
Etiquetas: ELN, Fuerzas Quds, Hezbollah, Republica Islamica de Iran, Tareck El Aissami, Triple Frontera
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home