La derrota de Chávez y su bodrio
Por: Manuel Isidro Molina.
Nada más inmediatamente posible que la primera derrota política del presidente Hugo Chávez Frías. Su bodrio constitucional puede ser frustrado por decisión mayoritaria de los venezolanos y venezolanas. La mayoría está en contra del proyecto de reforma constitucional, como lo registran todas las encuestas de opinión pública conocidas.
Sin embargo, Chávez y su desprestigiado entorno ricachón cuentan con la abstención para ganar el referendo del 2 de diciembre, con aproximadamente un tercio de los electores inscritos en el registro del Consejo Nacional Electoral.
.
Si todas las personas opuestas al bodrio constitucional concurren a votar “NO”, la derrota del oficialismo es segura. La única opción de triunfo del gobierno pasa por la abstención; es su apuesta, la estimulan, le dan beligerancia y cuentan con los voceros más fanatizados del antichavismo irracional.
Calculan también –Chávez y su desprestigiado entorno-las consecuencias de un irresponsable pronunciamiento militar (“golpe”), fácilmente sofocable, que daría suficientes argumentos favorables a la estabilidad del gobierno y simultánea aprobación democrática del bodrio constitucional. Un negocio redondo.
.
El crecimiento sostenido de la voluntad colectiva democrática para derrotar la reforma autocrática y monopartidista del chavismo, es el único enemigo que teme el gobierno. Chávez se la juega personalmente,como Carlos Andrés Pérez en 1989, con su paquete neoliberal. Ha colocado su fuerte liderazgo personal como salvavidas de un proyecto que la mayoría de los venezolanos y venezolanas rechazamos, incluidos importantes sectores que venían respaldando su gestión gubernamental, críticamente, inconformes con la deficiente obra de gobierno y la asquerosa corrupción de los chavistas encumbrados. Saben que un proyecto nacional de transformación democrática y justicia social –que todos compartimos- no pasa por el neogomecismo que quiere instaurar Chávez con su bodrio constitucional.
.
Abstenerse hoy, es votar por Chávez y su desprestigiado y enriquecido entorno. Es lo que al gobierno le interesa. Democráticamente hablando, la abstención es lo más ineficiente. El pueblo venezolano observa y discute, prepara colectivamente su decisión,pluralmente y sin ataduras partidistas. El criterio mayoritario es contra el bodrio constitucional chavista. La disyuntiva es ir a votar “NO” o abstenerse. Con el “NO” el bodrio es derrotable democráticamente; la abstención le sirve la mesa al gobierno.
.
Es una cuestión de criterio ciudadano, de alta responsabilidad individual y colectiva; bien sabemos que el proyecto de reforma nos amenaza a todos, pues de ser aprobado el 2 de diciembre, concentraría el poder en una sola persona y volcaría la arbitrariedad de unos pocos (los chavistas encumbrados) en contra de los derechos colectivos a la libertad y la justicia social en democracia, que hemos construido y defendido los venezolanos y venezolanas frente a los abusos del poder.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home