Militares gallinas

Por: Robin Rodriguez

Recientemente en el cuartel del Batallón Pedro Zaraza de Barcelona, un grupo de estudiantes dejaron unas gallinas en señal de protesta ante la falta de acciones de los militares en contra del gobierno de Chávez. Esta protesta o manera de manifestar, requiere de análisis; puesto que comparto el malestar de estos jóvenes pero considero que debemos tener cuidado en la formas de luchas que se aplican, ya que ellas deben tomar en consideración que estamos ante un régimen dirigidos por militares, con Chávez a la cabeza. La mayoría de esos militares que se les llama gallina, son responsables directos del mal gobierno que tenemos; creer que estimular un golpe militar resolvería la crisis política, económica, social y moral profundizada durante los últimos 10 años, nos puede llevar a pecar de ingenuos o tontos útiles de ciertas corrientes reaccionarias que tratan de sacarle provecho al malestar de la población para estimular una salida de esta naturaleza.

La asquerosa corrupción, la incapacidad demostrada del gobierno para atender las necesidades de la población a pesar de los grandes ingresos y el grosero derroche del dinero de la nación, viene haciendo mella en la conciencia de todos los venezolanos; de allí el auge del autoritarismo de Chávez como última alternativa para tratar de mantenerse en el poder, porque lo realmente subversivo para el gobierno es el posible surgimiento de una opción de cambio de carácter progresista y democrática que toque las fibras de las masas populares. Por esta razón opta siempre por la polarización con los sectores reaccionarios, para mantener la lucha entre chavistas y oposición, de pobres contra ricos o nacionalistas versus imperialistas; y no de los que queremos cambios profundos en la sociedad, desligados de las cúpulas del pasado y está falsa revolución.

Sí deschavetizamos el análisis sobre las rebeliones del 4 de febrero y el 27 de noviembre, nos daremos cuenta como logramos la unidad cívico-militar (Chávez era un factor mas) donde llegaron a participar figuras como Arturo Uslar Pietri y representantes de sectores económicos del país junto a religiosos como Mario Moronta, una fracción del partido de gobierno encabezado por Raúl Matos Azocar, fracciones del MAS, La Causa R, el PCV, el MEP, el Frente Guerrillero Américo Silva y dirigentes de izquierda. La unidad giró sobre la necesidad de salir del gobierno corrupto y antipopular de Carlos Andrés Pérez, pero dotados de una plataforma de lucha que tocaba aspectos socio-económicos, los cuales encontraban eco en las bases del bipartidismo que en ese momento se ubicaba en 43% de aceptación.

La Federación de Estudiantes Universitarios de Venezuela (FEUV) fue la punta de lanza en las diversas luchas escenificadas en ese entonces, logrando colocar en el debate publico, la propuesta de un Gobierno de Salvación Nacional (otros lo llamaban gobierno de Emergencia Nacional), que representaba un acuerdo entre los diversos sectores políticos, económicos y militares que participamos en dichas rebeliones. Independientemente que Chávez utilizó el impacto de la frase: "POR AHORA" para hacer creerle a la gente que todas esas cosas fueron planificadas o ejecutadas por su organización, todo en aras de venderse como un enviado de Dios para liberarnos del bipartidismo; no deja de representar una experiencia histórica digna de analizar a la hora de definir la manera de atacar al actual régimen.

Existe una gran diferencia, entre estimular un golpe militar y una rebelión popular con respaldo militar. Para lograr el respaldo popular se requiere identificarse con las necesidades y deseos de los más pobres; de allí que necesitamos líderes comprometidos con el pueblo y no del resultado del marketing político o multimillonarias campañas publicitarias.