Preservemos la insularidad

Por: Carlos R. Alvarado Grimán

Algunos neoespartanos están promoviendo la construcción de un puente que conecte las islas de Margarita y Coche con tierra firme bajo la premisa que, esta obra permitirá el mejoramiento de la calidad de vida de los que aquí vivimos, pero sin estimar su viabilidad socio-económica, humana y ambiental.

La justificación económica de una obra como la planteada debe medirse observando la relación costo - beneficio. Obras como el túnel que une a Francia con Inglaterra; los viaductos en el archipiélago nipón; los puentes sobre el Lago de Maracaibo y el Orinoco, se sustentan en el intenso movimiento comercial y de personas que en esas regiones se registran.

Es insoslayable el hecho que, nuevas empresas de Ferry no se han instalado en la región, debido a su inviabilidad económica. Creemos prioritario para nuestras islas, realizar inversiones para: el mejoramiento de las vialidades; servicios de aseo urbano, agua, gas y electricidad, evitando así condenarnos a vivir en niveles de existencia miserables.

El Puente incentivará el asentamiento de nuevas comunidades sin la debida planificación trayendo: efectos devastadores en nuestra forma de vida; profundización en el caos urbanístico; aumento en los niveles de inseguridad personal; tráfico de drogas; robo de vehículos y atentados contra la propiedad.

Debemos preservar la insularidad. Ese encanto mezcla misterio y fantasía que envuelve el sentirse apartados del mundo, aunque a escasos minutos de la cotidianidad, razón ésta que invita a nacionales y extranjeros a escogernos con preferencia, como su destino turístico.