Bin Laden y Chávez

Por: Sadio Garavini di Turno
Fuente: Venezuela Analítica

“La ceguera biológica impide ver, pero la ceguera ideológica impide pensar”, decía Octavio Paz. Efectivamente, la ceguera ideológica de Hugo Chávez le hace decir cosas que insultan a la inteligencia de cualquier “alfabeta”, que no sufra de la misma ceguera. Su “antiyankismo” visceral le ha hecho creer las teorías más fantasiosas, como cuando afirmó que el terremoto de Haití había sido provocado por un arma secreta de la marina norteamericana, o cuando aseveró que la llegada de Neil Amstrong a la luna en 1969 era una patraña publicitaria de los EEUU.

En esos casos, siguiendo la lógica aristotélica, debería Chávez explicarnos porqué los EEUU, suponiendo que poseyeran un arma con esos poderes, decidieron probarla en el pobre Haití y no en Irán, en Corea del Norte o en Cuba. Y porqué la Unión Soviética, en 1969, no denunció la mentira mediática norteamericana. En relación con el atentado de Al Qaeda del 11 de septiembre 2001, Chávez ha afirmado que el atentado había sido fabricado o permitido, por el presidente Bush, para tener la excusa de invadir Afganistán e Iraq.

Esta burda utilización de la poco seria teoría de la conspiración supone que Bush fue capaz de decidir y además convencer a, por lo menos, unas decenas de necesarios colaboradores a ser sus cómplices en la muerte de miles de conciudadanos inocentes y en la destrucción no sólo de las Torres Gemelas, sino del Pentágono y de la Casa Blanca (hacia allá iba el cuarto avión que se estrelló en Pensilvania) y además asumiendo el riesgo de que la conspiración saliera a la luz pública, en un país donde la filtración a la prensa es un deporte nacional.

En el comunicado del gobierno venezolano, emitido a raíz de la muerte de Bin Laden, se transmite la duda de que el terrorista haya muerto. Utilizando de nuevo la lógica que, en el régimen chavista escasea o está obnubilada por la ceguera ideológica, ¿se puede pensar seriamente que el presidente Obama correría el riesgo de ser desmentido y ridiculizado, a los pocos días u horas, con la presentación de un video de un Bin Laden, “vivito y coleando”? Su credibilidad y su reelección serían las víctimas fatales de esa soberana estupidez. Por eso, antes de anunciar su muerte se hizo una prueba de ADN.

Varios voceros chavistas han afirmado en estos días que Bin Laden era una creación de la CIA. En realidad, Bin Laden participó en la guerrilla, apoyada por el gobierno Reagan, en contra de la ocupación soviética de Afganistán en 1979, dirigida a mantener en el poder al entonces gobierno comunista.Pero, habría que recordar que, en ese entonces, estábamos en plena Guerra Fría y para los EEUU el enemigo prioritario era la URSS. El apoyo a la guerrilla antisoviética, en la cual la facción islamista de Bin Laden coexistía con otros grupos, concluyó con la salida de la URSS de Afganistán y la caída del gobierno comunista. Por tanto, se convirtió en uno de los mayores éxitos de la política exterior del presidente Reagan.

El mencionado comunicado del gobierno venezolano termina ratificando “su condena irrestricta al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.”¿Cómo se compadece esta afirmación con la reivindicación que hace Chávez del terrorista venezolano Ilich Ramírez, 'El Chacal', como un "luchador revolucionario”? Su conocida carta dirigida al Chacal, confeso admirador de Osama Bin Laden, termina con la frase: “Con profunda fe en la causa y en la misión ¡Por ahora y para siempre!”¿Cuáles serán la causa y la misión que comparten Chávez y el Chacal?

sadiogta@cantv.net