Walid Makled contrataba sicarios de Policarabobo
Fuente: El Nacional
"No se tomen la vida tan en serio, no, porque de esta no saldremos vivos". Esa fue la última frase que pronunció Orel Sambrano al cierre de su programa de radio el 16 de enero de 2009, en la emisora Radio América, donde entrevistó a Teodoro Petkoff. Eran las 2:02 pm y 40 minutos después, un par de sicarios acabaron con su vida en la calle Latouche de la urbanización Prebo, al norte de Valencia, cuando llegaba a una tienda de videos.
Once días antes, la muerte por encargo también sorprendió al veterinario Francisco Larrazábal Álamo, en su finca haras San Francisco, que está ubicada en la zona El Rosario, del municipio Libertador en Carabobo. El modus operandi fue similar: un par de motorizados localizó a la víctima, el parrillero se acercó y le disparó en tres oportunidades.
Ambos homicidios son mencionados en la solicitud de extradición a Venezuela de Walid Makled. Sambrano publicó información sobre los negocios del empresario y su supuesta vinculación con el tráfico de drogas, en una página de opinión que tenía en el semanario ABC de Valencia. Mientras, Larrazábal se vio forzado a declarar como testigo de la incautación de un alijo de droga en la finca El Rosario, propiedad de los Makled.
La Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia recibió con fecha 30 de agosto de 2010 una solicitud en forma extensiva de la extradición de Makled, a petición del Juzgado Sexto de Primera Instancia en Función de Control del Circuito Judicial Penal de Carabobo. El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha declarado que, según la Corte Suprema de Justicia de su país, el crimen por homicidio es más grave que el de narcotráfico. Esa es la base de la decisión de extraditar al "Turco" a Venezuela y no a Estados Unidos.
Crímenes por encargo
El comisario Robinson Castillo, jefe del Cicpc-Carabobo en el momento en que ocurrieron los crímenes, explica que la investigación se orientó a develar la autoría de los asesinatos. "Se hizo el trabajo de inteligencia sobre el cruce de llamadas en la zona y pudimos dar con las personas que estuvieron en los sitios de los homicidios, a las horas en que ocurrieron. Resultaron ser miembros de la banda Los Piloneros, liderada por el colombiano Víctor Reales Hoyos, comerciante del mercado de Los Guajiros, y algunos miembros de la Policía de Carabobo. Hubo una vinculación con casos anteriores", aseveró el jefe policial.
Reales Hoyos está en fuga actualmente. Fue quien concretó los encargos de las muertes de Sambrano y Larrazábal.
En la sentencia del TSJ se establece que las llamadas telefónicas implicaba a Makled, Reales Hoyos y a nueve hombres identificados como David Yánez Inciarte, Rafael Segundo Pérez, Arístides José Carvajal Salgado, Álvaro Luis Ospino, Armando Flores Trillo, José Joaquín Orozco Martínez, José Luque Daboín, Abel Reales Mejías y David Yánez Inciarte.
"En el grupo había funcionarios de la Policía de Carabobo. Dos de ellos fueron detenidos, David Yánez Inciarte y Rafael Segundo Pérez. Unos miembros de Los Piloneros murieron (Arístides Carvajal Salgado y José Joaquín Orozco) y otros están solicitados por la justicia venezolana", dijo el comisario.
Castillo asegura que había un grupo de Policarabobo que, a espaldas de sus jefes, trabajaban en la protección del empresario. Para entonces, el secretario de seguridad regional era Genis Vargas y el gobernador era el general de brigada retirado Luis Felipe Acosta Carlez.
A Los Piloneros se les acusa de homicidios, narcotráfico y mafias que funcionaban en el mercado Los Guajiros, al sur de Valencia. "Varios datos que se manejaron en la investigación enlazan a Makled, Víctor Reales y Los Piloneros, no sólo con esos dos crímenes, sino con otros homicidios que aún están en proceso de investigación".
El jefe policial que dirigió la pesquisa destacó: "Hay que recordar que el veterinario Larrazábal era vecino de Makled y ofreció su testimonio a las autoridades que trabajaron el caso de la droga incautada en la finca El Rosario. Dio detalles sobre los vuelos que aterrizaban en la finca y el movimiento que se registraba en los linderos". Creen que las declaraciones en la Fiscalía fueron filtradas y llegaron a conocimiento de Makled.
"Sambrano, tanto en prensa como en medios audiovisuales, denunció sistemáticamente muchas de las actuaciones de esa mafia de drogas que estaba incrustada en Carabobo", afirma. Las denuncias tenían detalles precisos sobre las mafias que implicaban a Makled.
Esa conducta le valió a Sambrano un anuncio público de Makled de que actuaría contra él penalmente. El locutor respondió en el semanario que prefería verlo en los tribunales antes que en un centro comercial. Ello preocupó a sus amigos porque sintieron que había una clara alusión a la muerte del fiscal Gamal Richani, asesinado en un centro comercial de Valencia el 5 de noviembre de 2005, presuntamente por sicarios del "Turco".
Un hombre afable
El veterinario Francisco Larrazábal Álamo era un hombre que amaba a los caballos y con un ferviente deseo de ayudar a quien lo requiriera. "Francisco era una persona de buen humor. Siempre mantenía el respeto y fue muy servicial", recuerda la veterinaria Carmen Uzcátegui de Gubaira, quien conoció al profesional durante 38 años.
"No cobraba a aquellas personas que tenían caballos y eran de escasos recursos. Sentimos su pérdida y nos hace bastante falta", se lamentó.
Larrazábal murió a los 51 años de edad, el 5 de enero de 2009, a manos de José Joaquín Orozco Martínez, quien entró al haras con sombrero pelo e'guama, solicitando al veterinario como si se tratara de una consulta. Orozco Martínez está señalado de pertenecer a Los Piloneros.
El crimen del veterinario ocurrió cuatro días después de su declaración en la Fiscalía, en relación con el decomiso del alijo de 400 kilos de drogas en la finca de Makled.
El ocurrente Orel Sambrano
Quienes conocieron a Sambrano coinciden en señalar como su rasgo fundamental la genialidad con la que afrontaba la vida y el sentido del humor. Sus sonoras carcajadas siempre estaban presentes.
El abogado y profesor de la Universidad de Carabobo, Rubén Pérez Silva, recuerda su amistad con Sambrano por más de 30 años, de los cuales 20 compartieron en el bufete de Pérez Silva.
"Él tenía una pasión por la actividad comunicacional. Se le dio la oportunidad como columnista de Notitarde y después con el programa de radio y televisión. Eso lo absorbió", indica Pérez Silva.
Otro de sus entrañables amigos, Laurentzi Odriozola, director de Notitarde, lo recuerda con especial afecto. Relata que horas antes de su muerte Sambrano asistió al Desayuno en la Redacción: "Nos despedimos en la puerta cuando salió hacia la radio para hacer su programa".
Cuando fue asesinado, Sambrano tenía 62 años de edad.
En ese momento dirigía Radio América, ABC de la Semana; tenía un programa de radio diario que transmitía también el canal NCTV, llamado La Nota Política, y era profesor de Derecho en la Universidad de Carabobo. Murió, presuntamente, a manos de Arístides José Carvajal Salgado.
Once días antes, la muerte por encargo también sorprendió al veterinario Francisco Larrazábal Álamo, en su finca haras San Francisco, que está ubicada en la zona El Rosario, del municipio Libertador en Carabobo. El modus operandi fue similar: un par de motorizados localizó a la víctima, el parrillero se acercó y le disparó en tres oportunidades.
Ambos homicidios son mencionados en la solicitud de extradición a Venezuela de Walid Makled. Sambrano publicó información sobre los negocios del empresario y su supuesta vinculación con el tráfico de drogas, en una página de opinión que tenía en el semanario ABC de Valencia. Mientras, Larrazábal se vio forzado a declarar como testigo de la incautación de un alijo de droga en la finca El Rosario, propiedad de los Makled.
La Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia recibió con fecha 30 de agosto de 2010 una solicitud en forma extensiva de la extradición de Makled, a petición del Juzgado Sexto de Primera Instancia en Función de Control del Circuito Judicial Penal de Carabobo. El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha declarado que, según la Corte Suprema de Justicia de su país, el crimen por homicidio es más grave que el de narcotráfico. Esa es la base de la decisión de extraditar al "Turco" a Venezuela y no a Estados Unidos.
Crímenes por encargo
El comisario Robinson Castillo, jefe del Cicpc-Carabobo en el momento en que ocurrieron los crímenes, explica que la investigación se orientó a develar la autoría de los asesinatos. "Se hizo el trabajo de inteligencia sobre el cruce de llamadas en la zona y pudimos dar con las personas que estuvieron en los sitios de los homicidios, a las horas en que ocurrieron. Resultaron ser miembros de la banda Los Piloneros, liderada por el colombiano Víctor Reales Hoyos, comerciante del mercado de Los Guajiros, y algunos miembros de la Policía de Carabobo. Hubo una vinculación con casos anteriores", aseveró el jefe policial.
Reales Hoyos está en fuga actualmente. Fue quien concretó los encargos de las muertes de Sambrano y Larrazábal.
En la sentencia del TSJ se establece que las llamadas telefónicas implicaba a Makled, Reales Hoyos y a nueve hombres identificados como David Yánez Inciarte, Rafael Segundo Pérez, Arístides José Carvajal Salgado, Álvaro Luis Ospino, Armando Flores Trillo, José Joaquín Orozco Martínez, José Luque Daboín, Abel Reales Mejías y David Yánez Inciarte.
"En el grupo había funcionarios de la Policía de Carabobo. Dos de ellos fueron detenidos, David Yánez Inciarte y Rafael Segundo Pérez. Unos miembros de Los Piloneros murieron (Arístides Carvajal Salgado y José Joaquín Orozco) y otros están solicitados por la justicia venezolana", dijo el comisario.
Castillo asegura que había un grupo de Policarabobo que, a espaldas de sus jefes, trabajaban en la protección del empresario. Para entonces, el secretario de seguridad regional era Genis Vargas y el gobernador era el general de brigada retirado Luis Felipe Acosta Carlez.
A Los Piloneros se les acusa de homicidios, narcotráfico y mafias que funcionaban en el mercado Los Guajiros, al sur de Valencia. "Varios datos que se manejaron en la investigación enlazan a Makled, Víctor Reales y Los Piloneros, no sólo con esos dos crímenes, sino con otros homicidios que aún están en proceso de investigación".
El jefe policial que dirigió la pesquisa destacó: "Hay que recordar que el veterinario Larrazábal era vecino de Makled y ofreció su testimonio a las autoridades que trabajaron el caso de la droga incautada en la finca El Rosario. Dio detalles sobre los vuelos que aterrizaban en la finca y el movimiento que se registraba en los linderos". Creen que las declaraciones en la Fiscalía fueron filtradas y llegaron a conocimiento de Makled.
"Sambrano, tanto en prensa como en medios audiovisuales, denunció sistemáticamente muchas de las actuaciones de esa mafia de drogas que estaba incrustada en Carabobo", afirma. Las denuncias tenían detalles precisos sobre las mafias que implicaban a Makled.
Esa conducta le valió a Sambrano un anuncio público de Makled de que actuaría contra él penalmente. El locutor respondió en el semanario que prefería verlo en los tribunales antes que en un centro comercial. Ello preocupó a sus amigos porque sintieron que había una clara alusión a la muerte del fiscal Gamal Richani, asesinado en un centro comercial de Valencia el 5 de noviembre de 2005, presuntamente por sicarios del "Turco".
Un hombre afable
El veterinario Francisco Larrazábal Álamo era un hombre que amaba a los caballos y con un ferviente deseo de ayudar a quien lo requiriera. "Francisco era una persona de buen humor. Siempre mantenía el respeto y fue muy servicial", recuerda la veterinaria Carmen Uzcátegui de Gubaira, quien conoció al profesional durante 38 años.
"No cobraba a aquellas personas que tenían caballos y eran de escasos recursos. Sentimos su pérdida y nos hace bastante falta", se lamentó.
Larrazábal murió a los 51 años de edad, el 5 de enero de 2009, a manos de José Joaquín Orozco Martínez, quien entró al haras con sombrero pelo e'guama, solicitando al veterinario como si se tratara de una consulta. Orozco Martínez está señalado de pertenecer a Los Piloneros.
El crimen del veterinario ocurrió cuatro días después de su declaración en la Fiscalía, en relación con el decomiso del alijo de 400 kilos de drogas en la finca de Makled.
El ocurrente Orel Sambrano
Quienes conocieron a Sambrano coinciden en señalar como su rasgo fundamental la genialidad con la que afrontaba la vida y el sentido del humor. Sus sonoras carcajadas siempre estaban presentes.
El abogado y profesor de la Universidad de Carabobo, Rubén Pérez Silva, recuerda su amistad con Sambrano por más de 30 años, de los cuales 20 compartieron en el bufete de Pérez Silva.
"Él tenía una pasión por la actividad comunicacional. Se le dio la oportunidad como columnista de Notitarde y después con el programa de radio y televisión. Eso lo absorbió", indica Pérez Silva.
Otro de sus entrañables amigos, Laurentzi Odriozola, director de Notitarde, lo recuerda con especial afecto. Relata que horas antes de su muerte Sambrano asistió al Desayuno en la Redacción: "Nos despedimos en la puerta cuando salió hacia la radio para hacer su programa".
Cuando fue asesinado, Sambrano tenía 62 años de edad.
En ese momento dirigía Radio América, ABC de la Semana; tenía un programa de radio diario que transmitía también el canal NCTV, llamado La Nota Política, y era profesor de Derecho en la Universidad de Carabobo. Murió, presuntamente, a manos de Arístides José Carvajal Salgado.
Etiquetas: narcoestado
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