Chávez: El Antisemita

Por: Carlos R. Alvarado Grimán

“El odio es la venganza de un cobarde intimidado”. George Bernard Shaw

En la Venezuela de Hugo Chávez, se han desatado inusitadas campañas de odio hacia las distintas minorías que hacen vida en nuestro país, principalmente contra los descendientes de europeos y la comunidad judía.

Contando con la aprobación cobarde y cómplice de los poderes públicos nacionales, el gobierno chavista ha lanzado su veneno apartheid, en clara violación de la Constitución Bolivariana que no permite discriminaciones fundadas en la raza, el sexo, el credo o en la condición social de los individuos.

El tema antisemita en Venezuela es particularmente curioso. El odio racial es completamente ajeno a nuestra cultura, alma y espiritu. Los venezolanos conformamos una sociedad, caracterizada por su tolerancia, amplitud y tradición integradora.

La comunidad judía a lo largo de los años, se dedicó casi en exclusiva, a sus actividades comerciales, empresariales y profesionales. Los judíos, no son hostiles al gobierno, no representan amenaza alguna para el chavismo, ni son parte beligerante dentro del drama político venezolano.

La propaganda de odio antisemita la enmarcamos dentro de la estrategia geopolítica de confrontación y destrucción del llamado “imperio norteamericano”, con lo cual ha logrado captar simpatías de: los residuos sociales agrupados en la izquierda parasitaria, grupos árabes extremistas y gobiernos forajidos.

Lo cierto es que, el antisemitismo chavista ha ocasionado el éxodo masivo de judíos, ocasionando la pérdida de capitales humanos valiosos y fuga de talentos difíciles de recuperar. Según el centro Simón Wiesenthal, la población judía en Venezuela ha descendido de 40,000 a unas 13,000 personas.

En el reciente informe de la OEA “Democracia y Derechos Humanos en Venezuela”, se ahonda y se documentan las acusaciones, que en el ámbito nacional e internacional hemos venido revelando, sobre hechos de violencia y de incitación al odio antisemita por parte de Chávez.

Todos los hechos denunciados en éste informe, deben encender las alarmas para obligar a Chávez a que respete los derechos humanos y civiles de todos quienes poblamos esta tierra, pero es importante que se diligencien ante las instancias correspondientes, la aplicación de sanciones internacionales ejemplarizantes.

El Tte. Coronel, representa uno de los mayores peligros para la comunidad judía en esta parte del mundo. “El fantasma del fascismo recorre Venezuela”. Alertamos al mundo civilizado. Cuidado con Chávez: ¡El antisemita!