El imperialismo y el neoliberalismo

Por: Robin Rodríguez

El neoliberalismo es la política económica del capital financiero y monopólico en los actuales momentos, ya que requiere de un nuevo modelo de acumulación de capitales. De allí que utilice la privatización como vía de ampliación y colocación de grandes sumas, además de ocupar todos los niveles del mercado mundial; el control cada vez mayor de la extracción de materias primas y energéticas, a la vez del incremento de la deuda de países como el nuestro, donde gobiernos títeres han hipotecado la nación con el Banco Mundial.
Cuando el prejuicio se antepone a los principios teóricos, incurrimos en el error de caracterizar erróneamente las cosas. Hay quienes consideran que el neoliberalismo era un invento ADECO-COPEYANO y que su salida del gobierno representa una ruptura con el nuevo liberalismo económico (neoliberalismo). Pero la continuidad del paquete económico de Carlos Andrés Pérez por parte de Rafael Caldera y el chiripero, demostró que no es así, además de evidenciar que los partidos políticos son representantes de los intereses de las clases sociales, pero no son una clase como tal; por lo tanto, partidos como Convergencia, el MVR y otros pueden llegar a representar los intereses de clase de AD y COPEI.
Durante el 1989 al 2006, con Carlos Andrés Pérez, Rafael Caldera y ahora con Hugo Chávez el neoliberalismo como táctica imperialista ha logrado crear el cuadro jurídico y las condiciones para facilitar el libre desplazamiento del capital financiero. El ingreso del país a los designios de la Organización Mundial del Comercio (OMC) como instancia que establece las áreas en que se desarrollaran las naciones miembros; el aumento la gasolina para darle entrada a las trasnacionales en dicho mercado; la flexibilidad laboral a través de la eliminación de la retroactividad de las prestaciones sociales (cuestión que este gobierno ha dejado intacta); la modificación a la Ley de Hidrocarburos por Chávez en la anterior Ley Habilitante y el libre mercado establecido en la constitución del 1999, son partes de las cosas que han afianzado las ganancias y el dominio de las trasnacionales y del sector financiero en el mercado venezolano.
Con decirle groserías a Bush, maldecir al capitalismo o al imperialismo no se cristalizan los cambios estructurales que nos llevarían a un modelo social de progreso y bienestar para todos. No es posible una revolución y muchos menos el socialismo, sino existe una ruptura con los intereses imperialistas que están representados en los monopolios y el sector financiero internacional. En el caso de Venezuela, el imperialismo esta encarnado en Venamcham ( Cámara Venezolano - Americana de Comercio e Industria) y la Asociación Bancaria, por lo tanto, los productores nacionales del campo y la ciudad debemos verlos como aliados en una etapa histórica del proceso de transición hacia el socialismo.
El imperialismo como categoría política o económica, que identifica la relación de desigualdad de una o varias potencias con el resto de las naciones; no debe limitarse a los EE.UU. porque se cometería un contrabando ideológico. Existen consorcios bolivianos, brasileros, argentinos y de muchos países, que llegan a Venezuela ofertando servicios, inversiones en áreas energéticas (petróleo y gas) o diversos productos; los cuales están relacionados al capital internacional hoy en día monopolizado, donde Estados Unidos tiene sus acciones.