Por: María Walter
"Mi abuelo, al tomar el café,/ me hablaba de Juárez y de Porfirio, /.../y el mantel
olía a pólvora./ Mi padre, al tomar la copa,/ me hablaba de Zapata y de
Villa, /.../ y el mantel olía a pólvora./ Yo me quedo callado:/ ¿de quién podría hablar?"
Octavio Paz
Intermitencias del Oeste (2) (Ladera Este)
LA D ERA
La era de la Humanidad adormecida llega a su fin, ello será por causa del gran acontecimiento fotónico del que hablan los físicos cuánticos[1] o por causa de simple evolución de la conciencia humana como argumentaba Pierre Teilhard de Chardin, sea una u otra la causa, el efecto será una realidad solo comprensible si partimos del hecho de que, la verdad como absoluto existe y es real. La práctica de vida civilizatoria que muestra el hacer alienado dará paso a este basta a toda forma de dominio que se gesta, que se moldea a expensas del manejo de hábiles reflectores y palabras en sin fin de aplausos… La cotidianidad asfixiante que a lo largo y ancho del mundo sin esfuerzo nos advierte que todo cambia o dejamos de existir, muestra nuestros desatinos como fracciones de ese todo explosivo que intrépido nos exige reflexión y acciones contundentes, antes de que el Siglo y la amada tierra digan con su propia fuerza: DESPERTAD!!
Todo ocurre rapidísimo, todo se da a la velocidad del siglo, cuando apenas nos asomamos a conocer de un caso, otro aparece con igual o mas fuerza que el anterior, suerte de olas encrespadas de este mar bravío que por nuestra obra colectiva e individualizada hemos provocado en tornados. El fin de este orden de cosas tal vez escapa a nuestra vista no porque no exista la verdad como absoluto, sino que, humanos y vulnerables como somos -sojuzgados a poderes que en nuestro nombre deciden acerca de formas de organización, modelos productivos, formas de ocupación y acciones de guerra- nuestra prospectiva resulta afectada, así, logramos conocer y difundir solo fracciones de ese todo, cual si la verdad fuesen dos y no una, cual si el futuro ciertamente se organizara por vía de elaborar mentiras y paradas y, no a causa del valor y la templanza.
En Venezuela, ese mar turbulento con su fuerza un buen día muestra a un hombre sacando cangrejos y nuestra mirada se desplaza hasta ver con lujos de detalles como se niegan maniobras impropias a la Moral y Ética Ciudadana de la cual constitucionalmente tiene compromiso de rectoría la Fiscalia; cuando nuestros ojos cansados de seguir el maletín viajero, aprovechan de cerrarse un momento para escudriñar los acontecimientos derivados de la escasez de carne o de la gasolina y, así como si surgiera de la nada, una nueva protesta/ tranca de autopista ocurre en Maracay donde los árboles se suman ofreciendo sus dulces mangos para el disfrute y todo a causa de que los venezolanos somos el pueblo mas feliz* lo que implica decir que pase lo que pase, tenemos capacidad de aguante y de respuesta, así por ejemplo fácilmente a causa de esas “habilidades” “surgen los entarimados y, vista la urgencia, los sapos se metamorfosean a gato, total los días por venir son muchos antes de las nuevas elecciones regionales, caravana de carnaval de pasos por los barrios y desde ya, martillea la inolvidable idea de permanecer eternamente …
Por que la verdad es una?
La verdad es una porque ella existe y es real, en consecuencia, absoluta. Podrá una y mil veces negarse, anteponiéndose a ella otra verdad o verdades, cual si fuesen ciertas, pero solo una será la verdad, las restantes solo falsas verdades o verdades aparentes, la única verdad, la verdad verdadera es la que Es, es decir la verdad inmaculada, contraria(s) a ésta, pretendiendo negarla otras existirán, sin embargo, todas tendrán mácula pues su existencia surge de lo contrario a la verdad que es la mentira, es por ello que, el no mentirás es un principio ya que por mucho que se busque ocultar la verdad verdadera ella, quedará a resguardo porque existe y es real, sin mácula.
Para aquellos entendidos en la materia, todo acontecimiento ocurrido o por ocurrir en el plano material se dice, existe a perfecta replica en AKASHA, especie de archivo imperecedero “grabado en el éter” que no solo facilita se registre todo cuanto la Humanidad realiza sino que asegura su resguardo[2], así cualquier hecho civilizatorio que se quiera “conocer” está allí “disponible”, tales archivos son la fuente de información de todo absolutamente todos los sucesos, acciones, deseos, pensamientos y sentimientos que han ocurrido –y ocurrirán- desde el inicio de los tiempos, en consecuencia, son archivos donde la verdad queda registrada, solo que, igual queda registrada también toda acción que contra ella, la verdad, se haya pretendido... Es de esta manera que, la verdad verdadera queda –al margen del arbitrio humano- archivada y a resguardo, así como, igualmente quedan en tales “archivos” las verdades aparentes o falsas verdades que la gente suele “elaborar” como escudo para “escapar” de alguna circunstancia, urgencia…
Nada queda oculto bajo el sol. Por mucho que se pretenda en consecuencia, falsear la verdad, resulta absolutamente imposible pues la verdad verdadera, la luz la guarda y como tal, existe y mostrará su fuerza.
La justicia se nutre de la verdad verdadera. Cuando ésta se oculta mediante recursos procesales, artilugios, entarimados, por mucho que se pretenda hacer ver tales actos “como acción de justicia”, la acción de justicia es para con los propios jueces y hacedores de la Ley. Aún cuando el sentenciado de oficio, sea otro, cuando el Juez juzga, al mismo tiempo es juzgado, actuando en tal acción de justicia la máxima Ley de Causa y Efecto, pues ellos –los jueces y funcionarios de consubstanciación de causas judiciales y edictos- son responsables de sus actos acerca de la Justicia que se imparte en el Orbe, de tal manera que, actas adelantadas, actas basura - actas o leyes- “lo que sea” de nada valen como formula para vulnerar la Libertad… Tampoco valen rectificaciones de artículos de obstiga a posteriori. . La verdad es una. Todo absolutamente todo está siendo archivado en AKASHA y en la conciencia de los pueblos. Atentar en consecuencia contra el principio inmaculado de la verdad es pretensión humana, pues ello aunque no sea comprendido, resulta imposible.
Viajaras y te ocultarás. Cambiarás páginas escritas por otras, haciendo parecer como ciertas, falsas verdades, sin embargo, tú, hábil hacedor de mentiras de tu conciencia no tendrás escapatoria. En tiempo del gran despertad de la Humanidad, la verdadera acción de justicia impone de ropaje las vestiduras blancas.
Que la paz se expanda.
[1] Según Records Guinness
[2] Estos archivos akásicos guardan analogía con lo que Carl Jung llamó inconciente colectivo.
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